El proceso de peatonalización y remodelación de las calles del Centro se sigue extendiendo, alcanzando ya los barrios vecinos. El dinero europeo de los Fondos Feder, en concreto del programa EDUSI (Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrada), permitirán continuar con este proceso, que recibe una inyección de quince millones de euros a los que hay que sumar los 3,75 millones de aportación municipal, que aporta el 20% del montante final del proyecto.

El Ministerio de Hacienda ha aprobado la propuesta del Ayuntamiento de Málaga a través de la Oficina del Medio Ambiente Urbano (OMAU) para actuar en el entorno del Perchel-Lagunillas, de modo que la regeneración del Centro se extienda a los barrios vecinos.

Los 15 millones de euros concedidos servirán para poner en marcha varios proyectos de recuperación de espacios degradados del distrito Centro, como Lagunillas, El Ejido y la Trinidad, con el plazo final de ejecución en 2020. Sin embargo, el proyecto que más llama la atención es la semipeatonalización de Carretería y Álamos, una vía clave para el acceso al Centro y que se ha convertido en la principal prioridad de actuación de la Gerencia de Urbanismo.

La intervención en estas dos calles va encaminada a dar continuidad al proceso de remodelación y peatonalización del Centro. De hecho, la propuesta que maneja el Ayuntamiento es invertir unos cuatro millones de euros para modernizar la infraestructura de canalizaciones que recorren la calle, que data de los años 50 y 60 y ya se encuentra con algunos problemas de conservación.

Aprovechando esta actuación en el subsuelo, Urbanismo plantea cambiar la configuración de la calle para equipararla al resto del Centro Histórico. Esto supone dejar la acera y la carretera al mismo nivel, diferenciando el carril de circulación mediante el dibujo y material de la solería.

Este diseño reforzará la percepción de preferencia peatonal en Carretería y Álamos, ya que los coches transitarán por un único carril y con velocidad limitada a 30 kilómetros a la hora. Las aceras se ampliarán en todo lo posible, sobre todo en Carretería, donde hay más espacio. Esto se hará a costa de reducir el carril de circulación y eliminar aparcamientos. Al menos esa es la primera idea manejada en Urbanismo, que queda pendiente de consensuar con los vecinos su diseño final.

Precisamente, la participación ciudadana es una de las claves de la financiación de proyectos a cargo de este programa europeo. De hecho, ya se han planteado reuniones con vecinos y comerciantes para adelantar las actuaciones en otras áreas del entorno del Centro incluidas en este plan de inversión.

Lagunillas, El Ejido y Trinidad. Los 18,75 millones de euros con los que está dotado el plan de inversión (el 80% financiados por la UE y el resto, por el Ayuntamiento) aseguran varias actuaciones de calado en el entorno del Centro que se sumarán a la remodelación de Carretería y Álamos. De hecho, la intervención para la mejora urbana de Lagunillas es la segunda prioridad del Plan Perchel-Lagunillas, con idea de recuperar este entorno profundamente degradado.

La actuación prevista, que todavía se tiene que cerrar, se centrará en la remodelación de las calles, tanto las canalizaciones como la calzada y acerado. Estas obras se acompañarán de la dotación de equipamiento para el barrio, aprovechando que está a punto de aprobarse el acuerdo entre la Consejería de Fomento y el Ayuntamiento de Málaga para repartir los solares que quedaron libres tras el fracaso del proyecto autonómico de las tecnocasas. Así, las dos actuaciones irán de la mano, de modo que en cuatro años se le dé un impulso importante a este barrio.

Urbanismo, además, está ya trabajando con los vecinos para intervenir en El Ejido, dándole uso a las instalaciones cedidas por la Universidad de Málaga al Ayuntamiento, y en La Trinidad. Estos proyectos se acometerán en fases posteriores, entre 2019 y 2020, que es cuando termina el plazo para utilizar los fondos de la UE.