­El Colegio de Abogados de Málaga celebró ayer la festividad de su patrona, Santa Teresa de Jesús, en un multitudinario acto celebrado en el auditorio Edgar Neville de la Diputación Provincial. Durante su discurso, el decano, Francisco Javier Lara, recordó la lucha de su Junta de Gobierno contra la Ley de Tasas Judiciales, el partido judicial uniprovincial o los honorarios del Turno de Oficio, y pidió a los juristas que «no bajen la guardia».

El colegio reconoció ayer a los colegiados que han cumplido 25 años de ejercicio, en concreto a 133 de ellos, así como a los dos abogados que llevan medio siglo como letrados, Manuel López de Ayala y Agustín Palacios. Asimismo, la responsable del Servicio de Orientación Jurídica Penitenciaria, María del Mar González Ortega, fue galardonada con la Medalla del colegio. Además, Belén Villena y Guillermo Jiménez recibieron la Medalla al Mérito al Servicio de la Abogacía y también fue distinguido el colectivo de periodistas judiciales.

En su discurso, el decano recalcó que, después de un periodo de tensiones con los jueces y fiscales, las relaciones están ahora mucho mejor, porque las «instituciones están por encima de las personas». Asimismo, destacó que el Estado de Derecho existe «gracias a los abogados», y pidió a los colegiados homenajeados que se pregunten cuántos problemas han solucionado en los últimos años.

Luego recordó las luchas que ha abanderado su Junta de Gobierno en los últimos cuatro años, empezando por la Ley de Tasas Judiciales, pasando por la Ley de Demarcación y Planta que preconizaba el partido judicial uniprovincial o el retraso en los pagos del turno de oficio. «Málaga fue el único colegio andaluz que se opuso al borrador de orden que reducía los honorarios del Turno de Oficio hasta un 55%», dijo, para añadir: «No bajaremos la guardia». «Se ha trabajado contra determinados excesos de la Junta», dijo.

También señaló el papel jugado por los periodistas en la consecución de todos esos logros como transmisores de las reivindicaciones colegiales. «Habéis acudido a nuestras manifestaciones, y las medidas de presión hubieran sido inútiles si no llegasen a la ciudadanía», precisó.

Incluso, destacó el papel de su Junta de Gobierno en el sentido de abrir las ventanas a toda la ciudad, «se ha dignificado la figura del abogado de oficio y se ha logrado el reconocimiento público de la ciudadanía», apuntó.

El decano también sacó pecho de que los letrados malagueños han logrado las mayores calificaciones de la autonomía en las pruebas de acceso a la profesión y han quedado los octavos en el total español.

Congreso de la Abogacía. Esta es la semana grande de los letrados malagueños, puesto que hoy, jueves, arranca el Congreso Jurídico de la Abogacía Icamalaga en el Palacio de Ferias de Torremolinos, un evento que se ha consolidado como «el más importante» de su naturaleza en España y que ya cuenta con más de 1.600 inscritos.

El evento será inaugurado hoy por el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, a quien, por cierto, tuvieron que recoger ayer el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, y sus asesores, presentes en el acto de los letrados.

Bendodo, en su discurso, recordó el trabajo de los letrados, por ejemplo, en la lucha contra los desahucios. «Habéis evitado quinientas tragedias», dijo en alusión al convenio suscrito con la institución que preside, y el presidente de la Audiencia, Antonio Alcalá, hizo bromas sobre el hecho de que llevaba puesta una toga de abogado, lo que indicaría que nunca ha habido malas relaciones entre los jueces y los letrados.

Los abogados homenajeados repasaron cómo era el colegio en sus inicios y relataron anécdotas acaecidas a lo largo de sus años de ejercicio entre las risas de un auditorio entregado. Al mediodía, numerosos letrados hicieron su jura en el mismo auditorio. La semana grande de los abogados malagueños culmina hoy y mañana con el congreso, en el que se tratarán temas de gran actualidad jurídica tales como el derecho al olvido en internet y el juego limpio financiero de la FIFA.