La Ciudad de la Justicia de Málaga cuenta desde hoy con una Sala Gesell, se trata de dos cámaras separadas entre sí por una amplia cristalera de forma que en una de las zonas pueden declarar víctimas especialmente vulnerables en procesos penales como niños o maltratadas y en la otra se sitúan el juez, el fiscal y los abogados. Así, víctima y victimario no tendrían contacto. El que declara, habitualmente acompañado de un psicólogo, no puede ver a las partes del procedimiento, aunque estos sí visualizan a quienes realizan la diligencia.

Esta sala, creada por el psicólogo y pediatra norteamericano Arnold Gesell, se encuentra en las dependencias del Instituto de Medicina Legal y está a disposición de los juzgados y tribunales de Málaga para la exploración de menores y otras personas especialmente vulnerables y sólo otras dos ciudades españolas cuentan con una. De esta forma, se trata de dos habitaciones separadas por una pared que cuenta con un cristal de grandes dimensiones que permite la visión de lo que ocurre en una de ellas pero no al revés.

El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, ha explicado que esta sala servirá para "exploraciones, declaraciones testificales y otras pruebas con menores o colectivos vulnerables de forma que durante la práctica de la diligencia se mantendrá la intimidad de la víctima, esta gana en confianza y se evita su victimización secundaria".

La zona de entrevista, decorada de forma muy agradable y siguiendo criterios psicológicos y pedagógicos, se encuentra insonorizada y dotada de un sistema de grabación de audio y vídeo y está interconectada por audio con la zona de observación, lo que permite la interactuación del magistrado con la persona que realiza la diligencia, ha señalado Ruiz Espejo, quien ha añadido que existe la posibilidad de realizar la observación remotamente a través de videoconferencia, incluso desde la sala de vistas.

La secretaria general de Justicia, Mercedes Fernández Ordóñez, ha indicado que esta herramienta "viene a mejorar la protección y privacidad de las víctimas, especialmente diseñada para causas en las que hay menores".

El presidente de la Audiencia, Antonio Alcalá, ha aclarado que se trata de un esfuerzo por proteger a las personas más vulnerables y que estará a disposición de los más de ochenta juzgados que hay en la capital, mientras que el juez decano, José María Páez, ha destacado que se trata de una sala pionera en Andalucía. "Estamos abiertos a que otros equipos técnicos que quieran usar la sala lo hagan", ha precisado.

La sala Gesell posibilita un ambiente de privacidad que puede evitar la victimización secundaria, la pérdida de elementos de prueba y las consecuencias negativas que ello supone para las especialmente vulnerables, "como menores de edad, con movilidad reducida, ancianos, entre otras, que además de haber sido víctimas de un delito tienen que pasar por la instrucción del procedimiento en su caso por el juicio oral", ha relatado el delegado del Gobierno.

En la sala se dan circunstancias tales como tranquilidad, sosiego y protección, modulando las víctimas su interrogatorio ante el juez o el fiscal en los términos previstos en el Estatuto de la Víctima, evitando el impacto emocional que implica, así como, especialmente, el efecto traumatizador del recuerdo agravado con la confrontación visual con las personas investigadas, inculpadas, procesadas o acusadas.