La ausencia prolongada de lluvias ha provocado la muerte de un centenar de peces en la zona del Paraje Natural de la Desembocadura del Guadalhorce los últimos días.

Un vecino de la zona alertó a este diario, que ayer se puso en contacto con la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que envió a un técnico. El director del Paraje Natural del Guadalhorce, Manuel Rendón, informó ayer de que se habían localizado 95 peces muertos.

El responsable de este espacio protegido descartó sin embargo que la causa fuera algún vertido de aguas residuales, algo que habría causado la muerte «a miles de peces».

Por contra, subrayó que la causa se debe a la sequía prolongada. «Uno de los problemas es que en verano comienzan a morir peces grandes y como el periodo de estiaje se está extendiendo, como consecuencia hay poco caudal de agua», destacó.

Además, Manuel Rendón explicó que a la bajada del nivel de agua hay que sumar la presencia de algas microscópicas que si bien durante el día producen fotosíntesis, durante la noche necesitan el oxígeno, lo que provoca un déficit para los peces grandes. «Y si estos peces se encuentran en zonas más o menos desconectadas, al llegar la noche, con ese déficit de oxígeno mueren». Rendón señaló por último que entre estos peces pueden encontrarse «seguramente alguna carpa y alguna lisa, porque es una zona de estuario donde, por los temporales, entran peces marinos.