­Son la conciencia de la justicia española porque cuando se reúnen lo hacen para hablar claro. Los jueces decanos españoles celebran los días 24, 25 y 26 de octubre su Reunión Nacional en Málaga, un foro que tradicionalmente ha dado muchos dolores de cabeza a políticos y jerarcas judiciales, porque a diferencia de otros puestos de gobierno en la carrera, estos togados son elegidos cada cinco años por sus propios compañeros. El programa, entre otras cosas, es toda una declaración de intenciones y los decanos debatirán sobre «la apariencia de politización de la justicia».

Este punto, con la que está cayendo con los juicios del caso Gürtel, las tarjetas Black o la reciente imputación de la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá, tiene varios apartados. «La interesada confusión entre responsabilidad judicial y política, el sistema de elección de los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la manipulación torticera del proceso penal», son diversos temas que constan en el programa del evento. Otro de los puntos a debatir es el que lleva por título «¿Hasta cuándo sin un pacto de Estado?», un asunto que se debatirá, según las fuentes, «sin mirar el pasado y mediante hechos y diálogo».

Asimismo, los jueces decanos españoles analizarán los problemas de la Justicia, hablando por ejemplo de «la falta de control de la litigiosidad y las medidas para reducirla, la planta judicial, la organización ‘desfasada’, el reparto competencial con las comunidades autónomas y la demarcación territorial».

La segunda parte del programa se centrará en las soluciones para agilizar, hacer más eficaz y dotar de mayor calidad a la actividad judicial, empezando por hablar sobre las cargas de trabajo. En relación a este aspecto, se tratarán «el problema de la corrupción, la reforma del proceso penal, el incremento de las inversiones, el control del uso abusivo del servicio público, las medidas para agilizar los procedimientos y las nuevas tecnologías, el número de jueces y los futuros tribunales de instancia».

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ya anunció en el Congreso Jurídico de la Abogacía Icamálaga, a principios de mes, que ahora toca hacer la gran reforma pendiente de la Justicia y, de hecho, ya se está negociando con el Consejo General de la Abogacía Española (CGAE). Así, los jueces decanos también estudiarán la viabilidad financiera del futuro pacto de Estado sobre este asunto y el fondo del mismo.

A Málaga acudirán, durante tres días, 52 jueces decanos españoles que representan a más de 2.000 togados, de forma que el miércoles, en la Ciudad de la Justicia, se leerán las conclusiones finales del encuentro. Hace unos años, en la reunión de Valencia, los jueces decanos fueron quienes apuntaron el camino para hacer más legalista el proceso de ejecución de los lanzamientos hipotecarios, lo que dio esperanza a muchas familias.