­Las grandes redes del narcotráfico han puesto su vista en la provincia, fundamentalmente para la producción de marihuana. Es un fenómeno que viene ocurriendo a lo largo de los últimos años debido al clima suave que impera en la Costa del Sol, ideal para estas plantas. El fiscal Antidroga de Málaga, Fernando Bentabol, señala que estas bandas asesoran a algunos agricultores profesionales malagueños sobre cómo plantar, les proveen de las semillas y del instrumental técnico necesario y, cuando llega la época de recogida, se llevan la cosecha para venderla donde corresponda.

Incluso, algunos de ellos han llegado a dejar de cultivar parte de sus tierras o sus invernaderos para dejar una jugosa extensión de sus parcelas a la marihuana, desde luego mucho más rentable que las lechugas o las patatas.

«Sigue ocurriendo. Muchos utilizan invernaderos, aprovechando que los tienen. En algunos invernaderos hemos encontrado parte de los mismos sembrados de maría», dice, para añadir: «Normalmente, más que ellos producir y vender, lo normal es que tengan el encargo previo de una organización que, incluso, en muchas ocasiones les facilita los medios para hacerlo, los focos, las semillas, les explican o les enseñan cómo es el sistema para producir y obtener la máxima producción, cuándo hay que cortar, qué parte hay que cortar, cómo ponerla a secar. Digamos que les instruyen en general sobre cómo tienen que preparar la droga, se la ponen, estos la cultivan y la propia organización les retira lo producido».

¿Cuánto pueden ganar con una plantación? El fiscal aclara: «Depende de lo grande que sea, pero un sueldo normal de un trabajador medio al mes se gana nada más que con eso», y asevera que algunos agricultores elimina su cultivo tradicional y plantan marihuana por eso. «Por supuesto, ganando diez veces más de lo que ganaría con un cultivo tradicional en la misma extensión», agrega.

Bentabol afirma que esto no es nada nuevo, sino que lleva varios años sucediendo en la Costa del Sol. «Las grandes plantaciones múltiples que se consiguen siempre tienen relación con una organización e investigando la red es cómo se localiza la sustancia», precisa el fiscal delegado de la Fiscalía Antidroga en Málaga.

Hay pocos datos al respecto, aunque prácticamente cada semana las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado envían a las redacciones de los medios una nota de prensa sobre el hallazgo de una importante plantación de marihuana, incluso indoor, como se conoce a las que se realizan en pisos y casas. El fenómeno afecta prácticamente a todas las comarcas de Málaga. Así, por ejemplo, el número de intervenciones realizadas contra este tipo de plantaciones entre agosto de 2013 y agosto de 2014 y el mismo periodo anterior aumentó un 34%, mientras que el número de plantas aprehendidas hasta octubre de 2014 superaba en un 120% a todas las incautadas en 2013, más del doble.

Ya lo dijo la policía en una información publicada por este periódico en octubre de 2014: «La dimensión que están alcanzando las plantaciones que estamos encontrando se sostiene en tres pilares: una enorme demanda, una gran organización y, fundamentalmente, un negocio redondo». Pese a que en Málaga son más habituales las plantaciones en el exterior, en los últimos años ha habido un auge de los cultivos indoor.