Es la gran apuesta europea para crear un gran corredor de tráfico de mercancías y de personas que una el arco mediterráneo español y francés con el corazón de Centroeuropa. Sin embargo, por ahora el Gobierno se ha centrado en terminar el trazado levantino, es decir, hasta Murcia, y empezando tímidamente los primeros estudios para extender la línea a Almería. Sin embargo, la diferencia de presupuesto consignado para cada tramo es más que evidente: mientras que en el tramo valenciano y murciano se han destinado 1.200 millones de euros, en el tramo murciano y andaluz ha rondado los 140 millones de euros. El impulso a completar este tramo se debe dar en esta legislatura con la conexión de Murcia y Almería, además de iniciar los estudios para unir Almería y Granada. Una vez realizados esos dos tramos, se enlazaría con la actual vía de Alta Velocidad entre Granada y Antequera, que conecta con Málaga, Córdoba y Sevilla. Eso supondría un salto de calidad en el transporte por ferrocarril de personas y mercancías.