­La pobreza, la desigualdad de género y la falta de protección de los Derechos de la Infancia son las principales causas de que al menos 62 millones de niñas en todo el mundo no tengan acceso a la educación, según la organización Plan International, que ha instado a niños y jóvenes a comprometerse como defensores y agentes de cambio.

La organización, que puso en marcha en 2007 la iniciativa «Por ser Niña» para concienciar a los menores, ha alertado en el marco del Día Internacional del Niño, que se celebra hoy, de que al menos el 30 por ciento de las niñas de entre 15 y 19 años han experimentado violencia de género. «La igualdad de género no es un asunto de niñas y mujeres, es un tema de Derechos Humanos. Es necesario cambiar el concepto de que los hombres son el problema y empezar a verlos como parte de la solución. El movimiento «Por Ser Niña» trabaja con los niños y los hombres para transformar las relaciones desiguales de poder y apostar por una sociedad igualitaria», explica la directora general de Plan International, Concha López.

Según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), unas 50.000 menores mueren cada año en todo el mundo debido a complicaciones durante el embarazo o el parto. Para afrontar esta situación, Plan International considera necesario su programa «Campeones del Cambio», con el que la organización pretende instaurar nuevos modelos de masculinidad que incluyan un cambio en las normas sociales establecidas.

Plan International se ha centrado en cambiar la forma de pensar de niños y jóvenes como parte de la solución para transformar las normas y prácticas discriminatorias existentes, que son la causa fundamental de que unas 14 millones de niñas se vean obligadas a casarse cada año.

En El Salvador, el 44 por ciento de los hombres piensa que ser violento forma parte de su naturaleza, y en República Dominicana al menos el 41 por ciento de los hombres se muestran reticentes a utilizar preservativos a la hora de mantener relaciones sexuales, según la organización.

La intención de la entidad al poner en marcha el programa «Campeones del Cambio» es la de introducir la participación juvenil y la movilización social para promover un cambio en países como Guatemala, donde el 45 por ciento de los hombres consideran que la principal responsabilidad de las mujeres es la de cuidar de la casa y cocinar para la familia.

El empoderamiento de las niñas y la implicación de los chicos en la igualdad de género solo tendrá lugar en aquellas comunidades que se enfrenten a las normas sociales sexistas establecidas y valoren a las niñas y los niños por igual, según Plan International, que intenta introducir diálogos intergeneracionales para que el compromiso de los menores esté respaldado por sus comunidades.