Un año más los hospitales de Málaga se preparan para hacer frente a los virus estacionales, que aumentarán la asistencia de los pacientes a las urgencias y también la cifra de ingresos. Aunque en los últimos años el virus de la gripe y de la gripe A apenas han tenido incidencia -con casuística de unos 600 casos por 100.000 habitantes la campaña pasada-, los centros sanitarios pondrán en funcionamiento todos los recursos para atender el previsible aumento de demanda de atenciones por gripe y resfriados.
El plan de alta frecuentación, que el año pasado se activó el 1 de diciembre, se pondrá en funcionamiento en los próximos días para hacer frente a los picos de asistencia propios de la época del año en que nos adentramos. La campaña de vacunación de la gripe aún está activa y los usuarios aún pueden sortear la agresividad del virus. Aunque de momento no se espera un fuerte pico, la previsible bajada de temperatura hará que aumenten las visitas a las urgencias y al médico de cabecera, por lo que los equipos sanitarios se están preparando.
Y es que con la bajada de temperaturas se produce un incremento de la demanda asistencial con un aumento de frecuentación en los servicios de urgencias, tanto de atención primaria como de atención hospitalaria. Las personas que más acuden a los puntos de urgencias son pacientes mayores, aquejados por diferentes patologías crónicas (cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca, bronconeumopatías) y pacientes pluripatológicos, cuyas enfermedades de base se descompensan con el frío y los virus circulantes. Por este motivo, la Consejería de Salud activa este plan a sabiendas de que los centros sanitarios recibirán más usuarios que, en ocasiones, colapsarán las urgencias.
No obstante, la apertura del Hospital de Cártama podría descongestionar las urgencias del Clínico, que en años anteriores han tenido, en momentos puntuales, colapso. En el caso de Carlos Haya, la dirección del centro confirmó que de momento no se ha producido un incremento asistencial, aunque sí confirmaron que en el Materno ha habido más atenciones relacionadas con catarro, pero sin especial relevancia.
El plan andaluz contempla la monitorización de tres parámetros: el aumento del número de urgencias, el incremento de pacientes pendientes de ingreso en las áreas de Observación hospitalarias y el número de pacientes que solicitan atención domiciliaria a los centros de atención primaria.
Teniendo en cuenta el porcentaje de incremento de la demanda, se establecen tres niveles de actuación tanto para los centros de atención primaria como para los hospitales. En función del incremento de pacientes, se ponen en marcha medidas organizativas, de gestión o de incremento de recursos que permitan a los centros sanitarios atender la actividad asistencial urgente. Además, el Plan incluye la creación de comisiones de seguimiento y coordinación de todos los servicios implicados en la atención a los pacientes urgentes, así como la necesidad de informar a la ciudadanía sobre los dispositivos a los que deben acudir en caso necesario y la importancia de un uso adecuado de los recursos de urgencias.
Con objeto de disminuir el número de personas afectadas y la severidad de los casos de gripe especialmente entre la población más vulnerable, la Consejería de Salud puso en marcha a final de octubre la campaña de vacunación para la que se han destinado 216.000 dosis de vacunas en la provincia. Se recomienda que lo hagan los mayores de 65 años, las personas con problemas crónicos, las embarazadas y aquellas personas que trabajan con grupos vulnerables.
