Ocho menores residentes en la zona de Cerrado de Calderón han sido detenidos por presuntamente destrozar una decena de marquesinas de paradas de autobús de la zona Este durante la noche de Halloween. Según informó este martes la Comisaría Provincial de Málaga, los investigadores han concluido que los jóvenes quedaron esa noche a través de un grupo de Whatsapp y que utilizaron para cometer los actos vandálicos un martillo rompelunas como los que hay en las ventanas de emergencias de los autocares y que ha sido localizado por los agentes. Las indagaciones de la Policía Nacional han permitido identificar a un grupo de menores residentes en esta zona residencial que la noche del 31 de octubre quedaron a través de la aplicación de mensajería instantánea y que se dedicaron a dar patadas al mobiliario urbano de la zona y a romper cristales. Especialmente en las paradas de la línea 33 de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT), aunque otras cuatro paradas de líneas próximas también sufrieron diferentes destrozos.
Tal y como publicó este diario entonces, las marquesinas dañadas se encontraban en el tramo que une la avenida de Pintor Sorolla con el Cerrado de Calderón y Parque Clavero, un recorrido que la policía cree que completaron a pie.
La EMT, que anunció que denunciaría los hechos una vez que valoraran todos los daños, contabilizó destrozos en seis marquesinas en la calle Olmos, otra en La Cerrajera, otra en la calle Matagallo (frente al número 77), otra en la calle Los Flamencos y dos en la calle Miguel Indurain, en la esquina con Sibelius y en la esquina con Marcos Obregón. Este no fue el único incidente en ese entorno del Cerrado de Calderón, ya que también transcendieron la rotura de varias papeleras y se ensuciaron las calles en los alrededores de los lugares habituales de botellón, como el mirador.
