­El presupuesto municipal de Málaga contará el año próximo con una partida económica para iniciar las obras de peatonalización de la Alameda, según aseguró ayer el alcalde, Francisco de la Torre, una vez que el Ayuntamiento, a través de la Gerencia de Urbanismo, ha optado por el modelo de peatonalización de los laterales, manteniendo las vías centrales para el tráfico.

El alcalde ha cedido finalmente a sus pretensiones iniciales que apostaban por peatonalizar las vías centrales de la Alameda y desviar el tráfico por el lateral norte. Los informes que han hecho doblar el pulso de De la Torre han venido del propio Ayuntamiento. Primero fue el área de Movilidad, que presentó un estudio de tráfico en el que se apostaba claramente por mantener el tráfico por el eje central del paseo y cerrar los laterales para el paseo peatonal. Finalmente ha sido la Gerencia de Urbanismo la que ha elaborado el anteproyecto que defenderá el Ayuntamiento, que mantiene el tráfico en el centro y la peatonalización de los laterales.

El modelo planteado por Urbanismo dibuja dos grandes plataformas reservadas para el transporte público (una para cada sentido), delimitando otros dos carriles para el tráfico que desde la zona Este se dirija hacia el Oeste de la capital. La intervención incluye la retirada de las cabeceras de la EMT en este punto, que serán trasladadas fuera, y previsiblemente se reducirá el número de paradas en este escenario.

Para llevar a cabo esta actuación, De la Torre explicó ayer que «trataremos de que haya una partida en los presupuestos del Ayuntamiento para acompañar al proyecto de la Junta», aunque añadió que aún no está definido el dinero que se destinará en 2017 a ello.

Dado que la Junta de Andalucía tiene el proyecto de peatonalizar el lateral norte de la Alameda, desde el puente de Tetuán hasta su confluencia con calle Larios como parte del proyecto complementario del metro, el Ayuntamiento asumiría el compromiso de peatonalizar el lateral sur que va desde la Alameda de Colón hasta la Acera de la Marina.

El compromiso de la Junta es que las obras en superficie del metro estén ejecutadas para agosto del año próximo y para esa fechar poder iniciar las tareas de peatonalización. Por ello, cuando el alcalde habla de «acompañar» el proyecto de la Junta, hace referencia a acometer las obras del lateral que le corresponden en las mismas fechas para que las obras en ambos laterales se realicen de manera conjunta como una sola. De hecho, Junta y Ayuntamiento tienen el compromiso de acordar proyectos similares para que la peatonalización responda a un único modelo.

Ello supone que la cantidad que asigne el Ayuntamiento a esta actuación será relativamente corta dado que las obras no podrían empezar hasta después del verano, por lo que el grueso de la actuación y del dinero vendría en 2018.