­El delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, presentó ayer, junto a la coordinadora del IAM, Rosa del Mar Rodríguez, y la coordinadora del IAJ, Silvia Cabrera, la campaña «No te pierdas, sin libertad no hay amor», para prevenir la violencia de género desde las primeras relaciones de pareja.

Esta acción, impulsada de manera conjunta por el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) y el Instituto Andaluz de la Juventud (IAJ), pretende prevenir la violencia de género en la juventud, a través de la pedagogía, concienciando sobre qué modelos de masculinidad, de amor y de sociedad pueden derivarle hacia la violencia machista, indicó Ruiz Espejo.

La campaña tiene como principal novedad que se dirige especialmente a los grupos de iguales o amistades, base de apoyo de las personas adolescentes en momentos de conflictos, y que, según ha detectado el equipo de profesionales de IAM, suelen respaldar al maltratador en el momento de la ruptura, debido a la manipulación de éste.

Según explicó el delegado del Gobierno, la iniciativa da continuidad a las campañas de 2013, «No es Amor», con la que se trabajó para enseñar a identificar las relaciones tóxicas y de dominación; de 2014, «Sí es Amor», con la que mostró a la juventud modelos de comportamientos en la pareja que sí son respetuosos; y a la de 2015, «El amor no se mide» con la que se pretendió dar a la juventud claves para saber identificar los roles sexistas que pueden llevar a una pareja a la violencia de género.

Con la puesta en marcha de esta nueva edición, se quiere dar un paso más «dirigiéndonos no sólo a ese chico o a esa chica, sino a ese entorno de amigos y amigas que pueden ayudar a salir de la violencia de género». Esta iniciativa, argumentó el delegado del Gobierno, viene a responder al hecho de que muchas jóvenes sufran acoso de su entorno tras romper con el maltratador, una situación que ha sido detectada por el equipo de profesionales del Servicio de Atención Psicológica a Víctimas Adolescentes del IAM.

En este sentido, en España, 637 chicas menores de 18 años recibieron en 2015 medidas de protección por la violencia machista sufrida a manos de sus parejas.