­Para Amparo su rey mago favorito es Melchor pero conocer al emisario de su realeza le ha valido para contarle qué quiere que le traigan el próximo día 5. Acompañada de sus padres, esta malagueña de tan solo 5 años fue de las primeras en pasar por la jaima que La Opinión de Málaga y Bioparc Fuengirola han montado al lado de la sede del periódico (calle Granada, 42) para que todos los niños dejen su carta a tiempo a sus majestades.

La pequeña ha pedido una excavadora, un Scalextric y una portería para jugar al golf con su primo y su padre. «Como verás, mi hija de juguetes sexistas, nada», expresó su padre. Amparo por su parte aseguró que se ha portado bien durante el año, una afirmación que han hecho todos los niños que han pasado por la jaima que abrió sus puertas ayer y estará hoy y mañana también para que ningún pequeño se quede sin entregar su lista de posibles regalos. El emisario real estará de 11.30 horas a 14.30 horas y por la tarde en horario de 16.30 a 21.00 horas.

El cartero real recibió ayer a niños y niñas de todas las edades, algunos acompañados de sus padres por su corta edad.

Otros, en cambio, fueron solos a contarle sus deseos de cara a la próxima noche mágica. Es el caso de María, una pequeña de tan solo 3 años que ha pedido unos juguetes de Pinypon y otros menos claros como «unos pinchitos de una forma» o «unas cartas con números». Su primo Raúl, de seis años y medio, como él mismo puntualizó, le ha pedido a los reyes una Nintendo 3DS, un robot attack y juegos. «Espero que a ti te traigan infinitas cosas los reyes», le dijo a una servidora.

Los hermanos Elena, Javi y Carlitos, de 9, 6 y 3 años, respectivamente también pasaron a informar al cartero real sobre sus deseos.

La mayor de los tres ha pedido una bicicleta, un muñeco Nenuco y una mascota; a poder ser, un perro o un conejo. Su hermano Javi aún llevaba la carta en la mano ya que esperaba a su primo para enviarla a Oriente pero contó que entre su inmensa lista hay un peluche y un Twister. El pequeño de los tres ha pedido un coche de bombero, un bombero en sí mismo y un puzzle.

Pablo, con solo 4 años, ha pedido un tragabolas y un circuito de coche. La vergüenza y emoción le pudo al ver al emisario frente a él pero tras salir de la jaima saltaba de alegría. Todos ellos se sentaron y conversaron unos segundos con el emisario real. Además, inmortalizaron el momento con una fotografía y se llevaron un pase «Berde» infantil para disfrutar de Bioparc Fuengirola todo el año. Una primera jornada agotadora para el cartero ya que pasaron infinidad de pequeños para depositar su carta. Todavía estás a tiempo para dejar la tuya si no lo has hecho.