Estreno soñado en la nueva administración de la Lotería Nacional situada en la calle Lagunillas, en el número 66. El local que abrió sus puertas por primera vez el pasado miércoles se ha unido al club de los repartidores de suerte con el segundo premio del sorteo correspondiente a la Lotería del Niño. Según el titular de la administración, Francisco Pérez, que acabó por tramitar la co licencia para que figure a su nombre el pasado 25 de diciembre, se trata de décimos que han sido vendidos todos a través de máquina. En este momento, se encuentra pendiente de que le comuniquen cuántos décimos, cada uno premiado con 75.000 euros, ha vendido exactamente.

En esta caso, además, la historia tiene aires de un cuento de Navidad de Charles Dickens. Resulta que el repartidor de la suerte se ha convertido, a su vez, en agraciado. El propio Francisco es uno de los afortunados que se han hecho con uno de los décimos premiados. Visiblemente emocionado, se ha limitado a decir que "hacía mucha falta" y que "esto sirve para tapar muchos agujeros". No es la primera vez que Francisco da un premio. El pasado mes de noviembre, antes de trasladarse a la nueva ubicación, su administración repartió diez décimos del segundo premio correspondiente al sorteo de la Loteria Nacional, dotado, cada uno, con 6.000 euros.

Felicidad en Lagunillas por el segundo premio de El Niño

Felicidad en Lagunillas por el segundo premio de El Niño