Una macrooperación ha permitido detener en una docena de países europeos a 245 personas por tráfico de armas o tenencia ilícita, de las que 46 han sido arrestadas en España y una en Málaga. Según informó ayer la Guardia Civil, la investigación ha permitido intervenir 664 armas de fuego, 33.748 cartuchos metálicos de diferentes calibres, granadas de mano, silenciadores, numerosos cargadores y piezas fundamentales de armas de fuego, entre otros muchos efectos, mientras que en nuestro país se han localizado 247 armas de fuego, más de 23.000 cartuchos metálicos de diferentes calibres y se han desarticulado cuatro talleres clandestinos para la transformación de armas y fabricación ilegal de munición y dos puntos de venta de armas ilegales a través de internet.

Además de Málaga, las detenciones se han extendido por Sevilla, Barcelona, Albacete, Bizkaia, Madrid, Murcia, Granada, Córdoba, Huelva, Jaén, Almería, Huesca, Alicante, Tarragona, Zaragoza, Badajoz y A Coruña. En los 46 entradas y registros también se han localizado plantaciones indoor de cultivo intensivo de marihuana con más de 270 plantas. La investigación, en la que han participado las policías de Rumanía, Grecia, Bélgica, Holanda, Polonia, Chipre, Finlandia, Suecia, Reino Unido y Bulgaria, ha concluido que los detenidos adquirían masivamente en países del Este armas detonadoras que manipulaban para convertirlas en armas operativas que efectuaban fuego real, algunas de las cuales se destinaban a la venta en el mercado negro y, por tanto, acababan utilizándose para cometer delitos. Esto ha evitado, según el instituto armado, que acabaran en manos de células yihadistas. Finalmente, es especialmente relevante la desarticulación de los cuatro talleres clandestinos en los que se realizaban la manipulación de las armas y donde al mismo tiempo se fabricaban municiones (de la que se intervino una gran cantidad); para lo que estaban dotados de abundante maquinaría y herramientas.