La delegada de Educación, Patricia Alba, ha presidido en la tarde de este jueves la Comisión Provincial de Conciertos Educativos, que incluye a la patronal del sector y asociaciones de padres y madres. En ella, Alba ha declarado que "en Málaga se mantendrá el concierto con todos y cada uno de los centros que actualmente tienen alguna etapa concertada, por lo que ningún alumno escolarizado en la provincia perderá su derecho al dicho concierto. Por ello, un niño que estudia en un centro concertado podrá seguir en el mismo, si es la elección de sus tutores, hasta el final de la etapa concertada que viniera ofreciendo ese centro".

La Comisión elabora una propuesta provincializada de planificación educativa en los centros concertados para el próximo curso, así como la redistribución racional de los recursos atendiendo a las necesidades concretas de cada zona, que será elevada posteriormente a la Consejería de Educación para su estudio y aprobación en su caso.

En esta planificación se ha tenido en cuenta la bajada demográfica producida en los últimos años que se traducirá inevitablemente en la menor demanda de plazas educativas.

En este marco, la delegada ha comunicado que continuarán las unidades que sean necesarias para garantizar la escolarización en septiembre.

La delegada ha informado también a la Comisión de que “los centros que ofertan educación Primaria y Secundaria en la actualidad renovarán sus conciertos en los próximos meses con total normalidad”.

Por otro lado, ha solicitado tranquilidad en los mensajes que se trasladan a la opinión pública ya que, en su opinión, "algunas de las informaciones que se envían a los medios de comunicación no se ajustan a la realidad y causan una alarma no justificada e innecesaria".

La delegada ha instado a los representantes de los centros concertados a que “no se dejen involucrar en la utilización política y partidista de la Educación, ya que a quien perjudica es al alumnado”.En cualquier caso, hay que recordar que Andalucía mantiene desde hace más de 30 años un modelo de convivencia entre la educación pública y la concertada estable que la Consejería de Educación no tiene intención de modificar.