El catedrático e historiador Juan Antonio Lacomba, andalucista y fundador del Ateneo, falleció el pasado sábado a los 78 años. Vinculado profesionalmente a Málaga y Andalucía, este histórico de la cultura malagueña había nacido en Chella (Valencia) pero desde 1966 vivía en Málaga. Ejerció como profesor de Historia Económica de la Universidad de Málaga entre 1979 y 2008, cuando se jubiló. Aún así, no había dejado de estudiar la historia de la comunidad autónoma, su gran pasión.

Fue fundador del Ateneo y llegó a ser presidente a principios de la década de los años 80 para fomentar aún más su conciencia crítica y para incrementar su amor por Andalucía. Durante un año fue director general de Patrimonio General en el Gobierno andaluz de Rafael Escuredo y en 2006 recibió la Medalla de Andalucía en reconocimiento a su dedicación a la historia de la comunidad autónoma, de la que destacaba el pasado industrial de Málaga, la economía andaluza del XVIII o Blas Infante, del que era uno de sus grandes historiadores.

Lacomba era licenciado en Filosofía y doctor en Historia, investigador del andalucismo histórico y de la economía regional. Ha publicado numerosos obras relacionadas con la historia económica de Málaga, Andalucía y España. Entre ellas destacan La crisis española de 1917; Introducción a la Historia económica de la España contemporánea; Crecimiento y crisis de la economía malagueña; Regionalismo y autonomía en la Andalucía contemporánea y Una historia del Banco Hipotecario de España. Asimismo, coordinó la Historia de Andalucía, editada por Ágora en 1996. Durante los últimos años Lacomba profundizó en el estudio y la investigación de diversos aspectos del andalucismo histórico. Así, en 2000 publicó Blas Infante y el despliegue del andalucismo y al año siguiente colaboró, junto a otros autores, en la elaboración del libro La identidad del pueblo andaluz, editado por el Defensor del Pueblo.

Llegó, incluso, a presentarse encabezando la lista por Málaga del Partido Andalucista al Congreso de los Diputados en las elecciones generales de 1989, aunque no obtuvo acta.

Lacomba fue uno de los grandes historiadores contemporáneos no sólo de la historia de Málaga, sino de la de Andalucía y España. Era de la escuela historiográfica moderna y de la escuela de Vicens Vives.

Gran contribución a la historia

Tuvo, además, mucha relación con Manuel Piñón de Lara cuando estaba en el exilio y sus investigaciones fueron decisivas para la historia económica de Málaga. El historiador Fernando Arcas admitía ayer su contribución a la historia ya desde su tesis doctoral, que dedicó a la crisis de España de 1917, en la que estudiaba la historia política y social de la historia.

Recuerda, además, su vocación de editor y animador de la historia contemporánea con la organización de actos o seminarios cuando era vocal de historia del Ateneo, institución que le nombró presidente de honor en los actos del 50 aniversario. «Gracias a Lacomba, en los 70, por el Ateneo de Málaga, pasó lo mejor de la historia, la sociología y la política española de esos momentos», apuntaba ayer Arcas, que recordaba cómo esas conferencias salieron en tres libros: Historia de España del siglo XIX, Historia de España del siglo XX, y después un ciclo de historia de Andalucía Aproximación a la historia de Andalucía, a juicio de Fernando Arcas la primera síntesis de historia andaluza moderna. «El primer libro andaluz de nuestro tiempo se debe a Lacomba».

Para Arcas, se va un intelectual, un entusiasta y un recuperador de la historia «blasinfantiana». «No es el único pero la teoría de Andalucía ha servido para concebir la Autonomía andaluza».

En homenaje al trabajo de Juan Antonio Lacomba y a su tesón por recuperar la historia de Andalucía, fuentes del Ateneo informaron ayer de que este mes proyectarán las imágenes de una entrevista que le hicieron para el documental Ateneo: historia de una resistencia, grabado con motivo del 50 aniversario de la entidad.