El Tribunal Supremo acordó ayer aplicar con efecto retroactivo la doctrina del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en relación con las cláusulas suelo abusivas, de forma que los bancos tendrán que devolver lo pagado de más por los clientes desde que esas cláusulas se firmaron. Lo que hizo ayer el Alto Tribunal español no es más que aplicar lo que ya dijo el TJUE en diciembre de 2016, pero ahora es oficial.

La Sala de lo Civil del Supremo estableció en mayo de 2013 que sólo se debía devolver lo pagado de más a partir de esa fecha dado que un desembolso millonario podía afectar al orden público económico nacional, es decir, a las entidades financieras que acababan de ser rescatadas por la Unión Europea. Sin embargo, el TJUE modificó esa doctrina al entender, como defendían muchos juristas, que lo que es nulo es nulo desde su principio, es decir, desde la firma de la hipoteca y por tanto no puede desplegar efectos de ningún tipo. De forma que si usted firmó su cláusula suelo en 2008 el banco tendrá que devolverle, además de dejar de aplicar ya la cláusula, lo pagado de más desde esa fecha, y no desde mayo de 2013 hasta ahora. Esto se aplica a aquellas cláusulas en las que se acredita falta de transparencia a la hora de ser comercializadas.

En Málaga hay entre 50.000 y 100.000 personas con cláusulas suelo que percibirán no más de 1.000 millones de euros. Sólo el 20% ha llevado a sus bancos a los tribunales.

El Supremo tomó esta decisión ayer porque estudiaba una sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona de diciembre de 2013, que ya declaró nula una cláusula. Se trata de una hipoteca suscrita con Unnim en mayo de 2005 sobre la que ahora BBVA tendrá que reembolsar al cliente 5.485 euros más los intereses.

El 9 de mayo de 2013, el Supremo declaró la nulidad de las cláusulas suelo en caso de vicio en el consentimiento, esto es, cuando el cliente que suscribió una hipoteca no recibió información de las peculiaridades y riesgos de este producto. Pese a ello, los afectados vieron esta decisión como un éxito parcial porque la devolución retroactiva se limitaba a esa fecha.

BBVA dijo ayer que van a cumplir este veredicto «sin reservas». La entidad ha provisionado ya 577 millones de euros para este menester, aunque el impacto en sus cuentas podría ascender a 1.200 millones de euros.

Quedan varias discusiones jurídicas abiertas, porque esta sentencia de mayo de 2013 vinculaba a tres entidades, y a una cuarta que se sumó después con otra, pero otros bancos se niegan a aceptar que esta jurisprudencia vaya con ellos y siguen poniendo trabas a los acuerdos Para la OCU, la cosa está clara: esto afecta a todos los bancos. Para evitar que la cosa se vaya de las manos en los juzgados, el Consejo General del Poder Judicial y el Ministerio de Justicia están ultimando un plan de choque contra la avalancha de demandas que presumen, medidas que consistirán en especializar un juzgado de Primera Instancia por provincia -que seguirá llevando otros casos-, adscribir al mismo Jueces de Adscripción Territorial (JAT), funcionarios, secretarios y medios materiales. Ayer el consejo se reunió con los presidentes de Tribunales Superiores de Justicia, que consideran urgente el plan, y el 21 lo hará con los jueces decanos, las piezas clave del engranaje, entre ellos el de Málaga. La idea es que no se colapsen los órganos civiles con las demandas de los que no lleguen a un acuerdo con el banco a través del sistema extrajudicial ideado por el Gobierno.

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, prometió los recursos solicitados, pero el consejero de Justicia e Interior de la Junta, Emilio de Llera, que será quien pague la fiesta -los funcionarios y los medios materiales dependerán de él- sin estar invitado, ya dijo ayer que no ve una avalancha de litigios en el horizonte y espera que se imponga la «cordura». Su esperanza es que las gestiones de Justicia y Economía lleguen a buen puerto y los bancos devuelvan el dinero a los afectados sin que tengan que acudir a los tribunales.

Además, a los jueces de base, que son los que van a tener que torear el morlaco que se les viene encima, no les ha gustado nada el plan de choque. Ayer, los jueces de Primera Instancia de Sevilla rechazaron por «descabellado» el plan de urgencia. Los togados alcanzaron un acuerdo por el que piden la retirada de dicha propuesta al considerarla «descabellada, oportunista y peligrosa», pues dicha medida llevaría al «colapso» al órgano especializado.