Las intensas lluvias del pasado fin de semana, con sus destrozos consiguientes, dieron paso ayer a otras fuertes lluvias, esta vez de palabras, de reproches, de recriminaciones y censuras en el pleno del Ayuntamiento, especialmente entre PP y PSOE, que desplegaron una fuerte artillería verbal para recriminarse la negligencia, el abandono y el desinterés que han tenido las instituciones controladas por uno y otro partido durante años para no dotar a Málaga de los equipamientos e infraestructuras necesarias que evitasen que la ciudad quede al socaire de las graves consecuencias de las avenidas y trombas de agua.
Acto seguido, unos y otros no dudaron en aprobarse mutuamente las reclamaciones, en forma de fondos y proyectos, que cada uno llevó a la sesión del pleno.
Algunos proyectos
De esta manera, junto a la moción urgente, presentada por el PP ,fue debatida también otra del PSOE relativa a las medidas a tomar contra las inundaciones.
El alcalde De la Torre defendió su propuesta de 27 proyectos que suman 42,3 millones. Destacan el estudio municipal de soluciones al arroyo de La Caleta, valorado en 13,3 millones de euros, y los planes directores de las dos márgenes del río Guadalmedina, con un presupuesto de 7 millones para el plan de la margen derecha y 5 millones para el de la izquierda.
El resto de los 27 proyectos para los que el alcalde pide financiación, son actuaciones en calles y avenidas, como la mejora del drenaje de la calle Canadá, en Teatinos, por 1,7 millones, o el de la calle César Vallejo, en el polígono del Guadalhorce, que tiene un coste de un millón.
La propuesta del PSOE, a su vez contiene un paquete de medidas como crear el gran corredor verde entre La Araña y la Sierra de Churriana o realizar un informe exhaustivo de aquellos desarrollos urbanísticos en zonas de pendiente que fueron construidos en los últimos años o están en ejecución, para analizar el cumplimiento de las medidas de impacto ambiental, centrándose especialmente en Colinas del Limonar, Hacienda Paredes, nuevas urbanizaciones en Mayorazgo o Parque Clavero.
El acuerdo, más artificioso que real, fue general, pero antes hubo un debate agrio y embutido de reproches, especialmente entre PP y PSOE.
«El Gobierno andaluz debe estar proactivo en esta materia y no estar insensible en ello», atacó el alcalde, Francisco de la Torre.
«Ustedes en ese tiempo de gobierno de De la Torre se han dedicado nada más que a poner dinero en la Málaga del escaparate, en la del embellecimiento y no en la que tienen que habitar los malagueños»; devolvió el golpe la portavoz del PSOE, Mari Carmen Moreno, que pasó al ataque: «Usted lleva 16 años y no ha realizado ningún proyecto; ¿por qué no lo ha hecho con los 30 millones de Art Natura o los 20 del Astoria?», se preguntó. «Este Ayuntamiento gasta mucho dinero donde no debe».
El resto de la oposición repartió sus críticas entre el PP y el PSOE, pero con más intensidad hacia los populares, a los que reprocharon «acusar a otros y echar balones fuera», señaló el edil independiente Juan José Espinosa.
«Hay que ponerse las pilas pero ya, y no es cuestión de competencias sino de actuación y vivir en las carnes lo que están sufriendo los vecinos», adujo la portavoz de Málaga Ahora, Ysabel Torralbo; con dosis de sensatez el concejal de Ciudadanos señaló que «el Ayuntamiento y la Junta deben trabajar de la mano y no usar las desgracias de los malagueños para confrontar». Eduardo Zorrilla, portavoz de IU, aclaró que en este tema «se tiene que ser riguroso y dejar de usarlo como arma arrojadiza entre distintas administraciones y por simple interés partidista».
