­La Diputación de Málaga pone en marcha la segunda campaña Málaga, provincia libre de acoso escolar siguiendo el compromiso iniciado el año pasado para prevenir conductas que atenten contra la libertad y la igualdad en los centros docentes. En esta edición, unas 2.000 personas de la comunidad educativa, entre estudiantes, profesorado y padres y madres participarán en la iniciativa.

El diputado delegado de Deportes, Juventud y Educación de la Diputación de Málaga, Cristóbal Ortega, presentó ayer, junto al director de Cultura y Educación, Pedro Bosquet, las actuaciones que se llevarán a cabo bajo la nueva campaña denominada Piña Power, con la que se quiere enfatizar el poder de la unión de todo el mundo contra la desigualdad y el acoso. El servicio de Educación de la institución provincial ha planificado más de 50 acciones hasta el mes de junio.

Ortega destacó que la campaña llevada a cabo por la Diputación el año pasado, en la que participaron un millar de escolares, «fue todo un éxito», y este año se incrementa el número de actuaciones.

«La Diputación es consciente de que tiene que aportar su ayuda ante la amenaza del acoso escolar. Por ello, hemos diseñado una campaña que complementa las acciones que, en esta materia, están desarrollando tanto el Gobierno Central como la Junta de Andalucía», dijo.

Incidió en que este año el principal objetivo de las acciones previstas es poner de manifiesto «la necesidad de unirnos, de hacernos una piña para ser más fuertes». En este sentido, se quiere hacer ver a las víctimas «que no están solas y que hay todo un conjunto de medidas impulsadas por las instituciones que les pueden ayudar».

En la campaña Piña Power, en la que se han editado chapas para aumentar su difusión, se han escogido «colores positivos y llenos de vida» porque, según ha explicado Ortega, «queremos lanzar un mensaje optimista, que entre por los ojos y, sobre todo, que la persona que se sienta objeto de acoso escolar se motive a pedir ayuda». Por ello, tienen especial protagonismo los teléfonos gratuitos a los que cualquiera pueden llamar: el teléfono de la Junta (900 102 188) y el del Gobierno de España (900 018 018).