Esta es una historia en dos partes. En la primera, el joven Carlos Medina Gutiérrez, nacido en Ronda aunque ha vivido siempre en Marbella, tiene 18 años y siente la necesidad de ponerse a escribir. Concluye una novela policiaca que guarda en el cajón.

En la segunda parte han pasado 11 años, decide darse otra oportunidad y cambiarla de arriba a abajo. El resultado se titula La sombra del ayer y ha sido publicada por la editorial nacional Atlantis.

«Desde pequeño he leído todo lo que caía en mis manos, no me importaba el género, pero sobre todo novelas de detectives; las novelas de Agatha Christie eran mi referente», explica el autor de la obra.

En su opinión, en esa primera versión de los 18 años «no prestaba atención ni al vocabulario ni a la estructura de las oraciones y tal como se me ocurría, iba escribiendo. Era una novela de detectives llena de contradicciones que no trabajé lo suficiente», concluye.

Sin embargo, con el paso de los años supo que ahí había material, por eso se puso manos a la obra y en esta segunda versión, «lo realmente difícil fue darle sentido a la historia, porque los enigmas, el asesinato, estaba planteado y no cambió con respecto a la segunda versión».

Carlos, que estudió Traducción e Interpretación, habla con La Opinión por teléfono porque es profesor de Inglés en un colegio madrileño y recalca que quiso que el escenario de La sombra de ayer fuera Ronda, su ciudad natal.

«Elegí Ronda porque a la hora de sacar a los protagonistas a la calle, la conozco y sé cómo es la vida allí pero también porque cuando de pequeño visité el Palacio del Rey Moro me transmitió muchísimo y pensé que era el lugar para hacer una película o plantear una historia y ese fue el punto de partida».

En la línea de clásicos como El conde de Montecristo, la novela de este autor malagueño comienza con el asesinato de una adinerada mujer de Ronda y con la detención y encarcelamiento de Roberto, el novio de su hija. «Es condenado a 25 años de cárcel y cuando sale, decidido a demostrar que no mató a la madre de su novia, contrata a la detective más afamada de la zona para buscar al verdadero culpable», detalla Carlos Medina, que señala que esa búsqueda de la verdad «le llevará a descubrir que nadie en la familia era lo que parecía y que todos tenían motivos para acabar con la vida de la millonaria».

El escritor cuenta que envió a tres editoriales la novela y una de ellas, Atlantis, le contestó diciéndole que le gustaría publicarla.

En La sombra del ayer, reconoce las influencias de dos de sus autoras preferidas, Agatha Christie y Camilla Läckberg y aunque admite que nunca se planteó que la historia podría trasladarse al cine o la televisión, ante la pregunta, «mentiría si no dijera que sí porque creo que tiene los ingredientes fundamentales para triunfar en ese mundo», dice.

Presentada en Marbella poco antes de su lanzamiento en enero, Carlos Medina no descarta presentarla este verano en·Ronda. «Por qué no, me gustaría».

Además, cuenta que ya tiene en mente «una pequeña idea» de una segunda novela con la misma detective. «Habría que trabajarla y ponerse manos a la obra». De momento, Ronda se envuelve en la intriga en La sombra del ayer.