La Inspección de la Junta de Andalucía ha vuelto a instar a la Diputación de Málaga a la "subsanación inmediata" de los desperfectos en el centro de discapacitados Guadalmedina, situado en la capital, después de comprobar que "se mantienen las mismas irregularidades" que en la anterior visita a estas instalaciones.

Así se expone en el informe de la inspección de fecha 1 de marzo, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se pone de manifiesto que continúan las mismas irregularidades que en la anterior actuación inspectora, a excepción de la limpieza a fondo de un dormitorio, la retirada de tres sillones deteriorados y la presentación del certificado de desinsectación y desratización de fecha 16 de enero de 2017.

Añade el documento que la institución debe presentar el compromiso de las reparaciones y obras a acometer así como los plazos ya que los "incumplimientos" pueden suponer una infracción tipificada como muy grave en la Ley de Atención a las Personas con Discapacidad de Andalucía.

Desde el centro se indicó a la inspección que la Diputación se ha comprometido a invertir 200.000 euros para subsanar las deficiencias, sin embargo, "esto no es suficiente", instando a la institución provincial a acometer las obras necesarias para subsanar todos desperfectos.

La Junta de Andalucía efectuó una inspección del centro el 1 de junio de 2016 "no detectando irregularidades" a excepción del arreglo de pomos de puertas de baños y el arreglo de estos, así como pintura en techos de baños de la primera planta y en algunos dormitorios.

El 23 de febrero pasado se realizó una nueva visita, ordenada por la delegada territorial, para comprobar el estado de las instalaciones, después de la denuncia pública efectuada por el PSOE en la Diputación de Málaga.

Entonces se observó un "gran deterioro en el mantenimiento del centro en todas sus instalaciones"; en tres sillones debido a la conducta de una residente; humedades en varias habitaciones; equipamiento "oxidado, muy deteriorado y en muy malas condiciones de conservación" en la cocina, aunque esta no se utiliza pues la comida se trae elaborada del Hospital Civil.

En dicha visita la inspección no observó existencia de roedores, ni insectos, indicando que las condiciones higiénicas del centro era "adecuadas", al igual que el aseo personal y el aspecto y prendas de vestir de los residentes. No obstante, se solicitó el certificado de desinsectación y desratización y que se subsanaran las deficiencias de forma inmediata aunque sin establecer un plazo.

Días después de esta visita, el 1 de marzo, se volvió a realizar otra de seguimiento, constando lo anteriormente expuesto y reiterando la necesidad de subsanar de forma "inmediata los incumplimientos detectados". La Junta de Andalucía seguirá realizando inspecciones en el centro hasta que se solventen la situación actual.