La parlamentaria andaluza por el PP de Málaga, Esperanza Oña, criticó ayer que el único centro especializado en atención temprana de niños con discapacidad auditiva de Málaga, gestionado por la Asociación de Padres y Amigos de los Sordos de Málaga (Aspansor), «ha quedado relegado por la Junta y no ha concertado con ella ninguna plaza pública». Este hecho, según aclaró Oña supone «una merma en el tratamiento que reciben estos menores y ponen en riesgo la continuidad de la propia asociación». En este sentido, la parlamentaria mantuvo una reunión con los responsables de la entidad para explicarles que desde el año 2004 estaba conveniado con la Junta de Andalucía una media de 20 plazas como centro de atención temprana. «En 2015 no pudo concurrir a esa convocatoria de subvenciones por los cambios introducidos por la Consejería de Salud».

Asimismo, Oña manifestó que, un año después,el gobierno andaluz «ha vuelto a permitir que se convenien plazas públicas con entidades especializadas». De esta forma, Aspansor ha podido concursar de nuevo y en la baremación ha resultado seleccionada entre las cuatro primeras de un listado de diez. «Aún así, el hecho de haber perdido un año en la prestación de este servicio ha perjudicado a la actividad de este centro», aseveró la parlamentaria.

«Los bandazos burocráticos de la Junta en las sucesivas convocatorias han dejado relegada a esta asociación y a los niños, que podrían recibir una atención específica y especializada para su transtorno de desarrollo y, sin embargo se ven obligados a acudir a centros generalistas», señaló Oña que también tuvo palabras para el proceso burocrático. «Cómo es posible que se haya permitido licitar como centro específico, como ha hecho Aspansor para luego no distinguirlos de los generalistas al no derivar los casos de los niños con sordera en esta asociación». «Este es un caso más que demuestra la falta de sensibilidad de los responsables de la Junta», sentenció.