El Centro Histórico de Málaga capital necesita ampliar cuanto antes su zona prime comercial para responder a la altísima demanda de las grandes cadenas nacionales e internacionales, que no encuentran ya locales disponibles en el codiciadísimo entorno de calle Larios, según afirmó ayer la consultora CBRE, que cree que tanto la Alameda Principal como el eje Carretería-Álamos deben ser los nuevos referentes para los operadores de la mano de los proyectados procesos de peatonalización. Y es que Málaga capital se ha convertido en una las ciudades más cotizadas de España en el mercado de alquileres comerciales de calle (high street en el argot), muy especialmente en el Centro, situándose en el top cinco de preferencias en los planes de expansión de los principales operadores (tras Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao), según un estudio inmobiliario de CBRE .

La presión se concentra sobre todo en el entorno compuesto por la calle Larios, plaza de la Constitución, calle Nueva y primer tramo de la calle Granada, lo que ha llevado a detectar operaciones con precios al nivel de Madrid y Barcelona, y propiciando una gran escasez de locales de más de 300 metros cuadrados, que son los considerados más aptos por los operadores para ubicar sus tiendas insignia. En calle Larios, en concreto, los locales a pie de calle se mueven en una horquilla de entre 155 y 230 euros por metro al mes, en calle Nueva van de 80 a 125 y en Granada de 95 a 170. CBRE también estima que en segmentos como el de cadenas de restauración (muy activas en zonas como Alcazabilla o Uncibay) o de moda, Málaga es incluso la tercera plaza que mayor interés despierta, tras Madrid y Barcelona.

«Málaga ha hecho muy bien sus deberes con toda la remodelación del Centro y la peatonalización de Larios y hoy es objeto de interés de todas las cadenas. También se ha posicionado en el segmento de turismo de compra con la llegada de cruceristas, que revitalizan toda la zona comercial», explicó la directora de CBRE en Andalucía, Rosa Madrid. Sin embargo, el mercado actual en el eje de Larios es «más de demanda que oferta» por lo que algunos de los precios que se están alcanzando rivalizan ya con los del barrio de Salamanca, en Madrid.

Así, tanto la Alameda como calles ahora «secundarias» como el eje Carretería-Álamos, además de la calle Victoria, deben sumarse a esa zona high street, según CBRE. Respecto a la Alameda, se afirmó que debe ser «la Gran Vía» de Málaga, por sus edificios emblemáticos y por ser la conexión con el Muelle Uno y con parte de la oferta museística. Sus fachadas son lugar propicio para la entrada de nuevos operadores comerciales.

«No todo el mundo puede estar en la calle Larios. Hay que hacer un esfuerzo para que se dé la teoría de los vasos comunicantes. Cuando uno está lleno debe extenderse como una balsa de aceite por todo el Centro. Esto tiene que ver con el urbanismo y con hacia dónde queremos llevar la zona comercial», comentó Madrid, que cree que el Ayuntamiento sí está realizando este esfuerzo.

Respecto a la peatonalización, señaló que es algo que casi siempre «genera mucha polémica» pero afirmó que «si se hace bien», de forma «planificada y no improvisada», va a generar «mucho comercio y riqueza», como a su juicio se ha demostrado en Málaga.

También se refirió al boom de apartamentos turísticos en el Centro. «Vemos que hay recorrido inmobiliario, es una oportunidad para transformar edificios obsoletos y que necesitan reformas. Pero hay que hacerlo con raciocinio y con operadores profesionales», opinó. De hecho, Madrid cree que a corto plazo se asistirá a una transformación de uso de diversos edificios, tanto para alquiler turístico como para alquiler general de viviendas, debido a la escasa oferta actual. «Ahora mismo hay varios inmuebles donde se está analizando la transformación», dijo.

Alza en otros segmentos

El informe de CBRE destaca también a la provincia de Málaga como «localización idónea y de gran interés» no sólo para inversores y empresas sino también para compra de vivienda. Además de constatar el repunte del sector (el precio de la vivienda subió un 8% en 2016, con las cifras de ventas y proyectos al alza), se destaca la recuperación del mercado del suelo, pues se han retomado la mayor parte de los proyectos que quedaron parados en la crisis. Este aumento de actividad, sobre todo en suelos urbanos, redujo los suelos disponibles y, por ello, incrementó los proyectos residenciales en municipios colindantes. Mijas, Estepona o Benahavís absorbieron la mayor actividad promotora.

En la capital, las zonas de Teatinos y de Tabacalera han vivido un «auténtico despegue» con el desarrollo de miles de viviendas en las parcelas del SUP T-7 y en parcelas pendientes de desarrollo del SUP T-6 y Cañada de los Cardos.

En cuanto a los inversores, en este nuevo ciclo la financiación bancaria ha sido sustituida por fondos y socimis. Así, CBRE observa cómo «los promotores locales con financiación de fondos internacionales, con aversión al riesgo, y en búsqueda de retornos rápidos son los más activos y los que mayores gestiones están cerrando». A falta de producto al alcance en Madrid o Barcelona, Málaga es un opción más que apetecible

El mercado de oficinas, por su parte, sigue en evolución positiva, con un stock en Málaga de 600.000 metros cuadrados. Y en el segmento de centros comerciales, Málaga presenta una alta densidad de 477 metros cuadrados por cada mil habitantes, pendiente aún del macroproyecto de Intu en Torremolinos. El sector industrial y logístico también repunta. Las empresas disponen aún de amplias opciones en alquiler y venta de naves pero CBRE advierte de que la falta de desarrollos a corto-medio plazo y de instalaciones de calidad obligará a buscar su ubicación fuera de Málaga capital. El CTM y algunas instalaciones aisladas en el polígono Trévenez y Guadalhorce son los únicos espacios disponibles, a espera del Puerto Seco de Antequera.