Pasado mañana es el día marcado en rojo para miles de agricultores de la comarca de la Axarquía. Por primera vez desde la apertura del embalse de la Viñuela en 1986 habrá restricciones en abril para las parcelas de riego. La Junta acaba de tomar una medida que es un claro aviso de lo que se avecina. De hecho, el campo malagueño ya no oculta su inquietud ante la posibilidad de instalarse en una sequía casi permanente.

Los sindicatos agrícolas alertan desde el pasado verano de la necesidad de que cambie la tendencia de las tres últimas campañas. De hecho, el principal pantano de la provincial, el de la Viñuela, está al 40% de su capacidad, con apenas 66 hectómetros cúbicos. A estas alturas del año, hace 12 meses se encontraba al 47% y la media de los últimos diez años se sitúa en el 66,5%. Son números catastróficos si se tiene en cuenta que en esta parte de la provincia, el litoral más oriental, se encuentra la principal despensa de Europa en frutas subtropicales.

Aguacates y mangos, que generan una facturación anual ya superior a 200 millones de euros, requieren de unos recursos hídricos que a medio plazo parecen insuficientes. Por este motivo, que entre el miércoles y el jueves de esta semana se corte el suministro a las dos zonas dependientes de la Viñuela supone ya un primer paso hacia unas restricciones que podrían ser aún más graves cuando llegue el periodo estival.

El secretario de Asaja en Málaga, Benjamín Faulí, expresaba no obstante que Medio Ambiente lo que ha hecho es «atender una reivindicación del sector agrario», la de establecer «medidas contra la sequía» mucho antes de que lleguen los meses veraniegos. Según los técnicos podría generarse con la medida que empieza a aplicarse esta Semana Santa un ahorro de abril a septiembre de 2 hectómetros cúbicos sólo en La Viñuela. El reto es acabar el calendario hidrológico con unos 48 hectómetros cúbicos, los que en dicho embalse había hace un año.

Pero no es la única medida que se ha puesto sobre la mesa en la provincia. A los soñados trasvases de agua desde la presa de Iznájar a la zona norte de la provincia, al objeto de poder evitar los cortes de suministro que la población ya sufrió el pasado año en sus domicilios, la Junta ya ha autorizado la conexión entre las fuentes del río Chíllar y las canalizaciones existentes desde La Viñuela hasta el término municipal de Torrox.

Nerja será solidaria

Todos los esfuerzos serán pocos a las puertas de que el estado de prealerta se agrave. Así lo manifestaron los responsables del organismo autonómico en la reciente reunión del Sistema de Explotación Viñuela-Axarquía, convocada por la Consejería de Medio Ambiente y con la presencia de los portavoces sindicales agrarios y de las comunidades de regantes en esa parte del litoral malagueño.

El encuentro dio a conocer que la Junta ya tiene redactado el proyecto en el río Chíllar, pese al rechazo que había despertado en el municipio nerjeño de manera inicial. En este sentido, la administración autonómica confía en que el Ayuntamiento resuelva uno de los asuntos más problemáticos que se dan en la Axarquía respecto a los suministros a viviendas. Existe un sector del municipio, con un cupo significativo de urbanizaciones en la misma situación, que se sirve de agua de la comunidad de regantes para abastecer a casas particulares. Pero es que los técnicos inciden en que hasta el Consistorio se halla en una situación irregular al permitir estas prácticas.

Solventado ese aspecto, en este mes de abril arrancarán los trabajos que en principio deben prolongarse durante cuatro meses. Faulí destacó que desde el comienzo de las obras ya se podrá llevar el agua de Nerja hasta el embalse de La Viñuela, con el correspondiente alivio para la sequía en la costa oriental, principalmente necesitada en el mapa provincial de la sequía.

El presidente provincial de Asaja, Baldomero Bellido, también se ha referido a la falta de precipitaciones que también afecta a otras áreas malagueñas. El balance de la campaña del olivar ha resultado negativo, en comparación a anteriores campañas, por la reducción en el número de kilos recolectados. Ya puso el acento en el sector en octubre pasado, al observarse que el año hidrológico empezaba con escasez de lluvias en áreas que no fuesen las del litoral. Por entonces comenzaba la recogida de la aceituna aloreña con cifras preocupantes.

El asunto incluso llegó al Parlamento andaluz, donde la integrante por Málaga del grupo del PP Patricia Navarro solicitaba «un paquete de medidas concretas para paliar los efectos de la sequía en las zonas orientales de Andalucía, hecho que en la provincia de Málaga motivó que la producción de aceituna aloreña hubiese caído hasta un sesenta por ciento».

Entre las medidas programables, la Diputación de Málaga e incluso dirigentes socialistas en la Mancomunidad Occidental hablan también de manera abierta sobre la posibilidad de conectar los recursos hídricos del embalse de la Concepción, en el entorno de Marbella, con los de la Axarquía. La autovía del agua entre las dos costas estaría disponible en ambos sentidos y no sólo cuado le hiciese falta a la costa oriental.