La presentación de la nueva marca y logotipo Málaga, ciudad de museos sirvió para reunir en el Gran Hotel Miramar a más de 200 representantes del sector turístico de la ciudad, agentes de viajes, empresarios y agentes culturales. También asistieron directores de museos, que tuvieron una destacada participación, ya que intervinieron en una mesa redonda en la que pusieron de manifiesto la potencialidad de Málaga en materia de turismo cultural, la transformación experimentada por la ciudad de la mano de esta apuesta estratégica y establecieron la hoja de ruta a seguir de cara al futuro, dejando clara la importancia de contar con técnicos experimentados y voluntad política.

De hecho, los expertos consideran que Málaga aún no ha tocado techo en esta materia. Así lo afirmó, por ejemplo, Manuel Matero, que elogió a la ciudad y consideró que «está encarrilada para que ese éxito esté cada día más cerca». «Se han aportado ideas muy inteligentes de cómo tiene que ser la hoja de ruta en los próximos 10 o 15 años», señaló el director de esta revista especializada. «El 99% de quienes visitan Málaga la recomiendan por ser destino de museos. ¿Cómo se ha llegado a esto? Con técnicos inteligentes y políticos decididos», destacó también, poniendo énfasis en la «rareza» que a su juicio ha supuesto la alianza entre administraciones públicas. «Málaga se reinventa utilizando el argumento de la cultura, que supone sofisticación, dinero y oportunidades», añadió.

El director del Centro de Arte Contemporáneo (CAC), Fernando Francés, también intervino en el coloquio. Desde su punto de vista, los valores de la estrategia de museos diseñada por Málaga es que son complementarios. «Se ha llevado a cabo un planteamiento para los turistas pero también para los propios malagueños, que pueden hacer un recorrido por la historia del arte de los tres últimos siglos sin salir de Málaga», resaltó.

Málaga ha cubierto un nicho que estaba vacío entre las grandes ciudades del sur de Europa, «por eso la respuesta ha sido tan sorprendente», a juicio de Francés, que recuerda cómo ciudades como Berlín, Hamburgo, Rotterdam, Amberes o Ámsterdam compiten en el norte por ser ciudades de museos.

José María Luna, director de la Casa Natal de Picasso, recordó que «sin el trabajo ni la presencia de la Casa Natal desde hace 29 años no estaríamos hablando de la misma Málaga». El también responsable de otros equipamientos museísticos de la ciudad, como el Museo Ruso o el Pompidou, puso el acento en la importancia de estos espacios expositivos «más allá del Centro».

José Lebrero, director del Museo Picasso Málaga, agregó que los museos son «lugar de diálogo, de tolerancia pero también de antagonismo, pero con respeto al enemigo». Y destacó que un museo no es solo su colección permanente, sino sobre todo, lo que le da vida, son sus exposiciones temporales. «Y en este sentido, las relacionadas con Picasso han aumentado». «Picasso ofrece una fortaleza como valor cultural a la ciudad. Es un referente identitario y aporta valor económico».

Por último, la directora del Museo de Málaga, María Morente, informó de que durante los primeros tres meses abierto al público, el de la Aduana ha recibido más de 100.000 visitas. «Era un museo deseado, que representa parte del ADN de la ciudad».

El acto fue presentado y conducido por los periodistas Santi Souvirón y Eva Encina, y contó con la intervención musical, al piano, de Toni Romero.