La Asociación Provincial de Empresarios del Transporte de Málaga (Apetam) ha advertido de que, de seguir las obras en el polígono Villa Rosa de la capital malagueña sin atender las demandas de las empresas, peligran 400 puestos de trabajo y la continuidad de 30 firmas malagueñas. Así, este colectivo ha ofrecido su colaboración para el «buen desarrollo» de las obras de adecuación del polígono industrial Villa Rosa, «con el fin de dar una solución definitiva a las dificultades que se están causando a los profesionales del transporte de viajeros por carretera».

Apetam, presidida por Juan Sierra, calcula que unos 200 autobuses maniobran diariamente por esas vías para salir y entrar de las cocheras de la zona. Y uno de los principales puntos de conexión para estos vehículos es el aeropuerto de Málaga. Con las molestias habituales que causan este tipo de reformas; en la actualidad, la mayoría de estos autobuses «tienen que realizar un rodeo innecesario hasta la entrada de la ciudad, a la altura del Pabellón José María Martín Carpena o del Centro Comercial Plaza Mayor, para poder tomar la dirección al aeropuerto».

Tanto Apetam como la Asociación de Polígonos Industriales de Málaga (Apoma) se plantean incluir una nueva rotonda en la avenida de Velázquez, junto a la sede de Makro, en el entronque con la avenida de Guadalmar, que facilite la labor profesional de los conductores, empresarios y peatones, «y haga menos engorrosa la circulación de vehículos en esta zona tan transitada». De esta forma, se habilitaría un acceso «mucho mejor al propio aeropuerto, uno de los destinos más habituales de estas empresas del transporte, a su polígono comercial, y a la antigua Carretera de Cádiz».

También instaron a que se aclare la contratación y la financiación del desdoblamiento de la avenida de Gualdamar, que está prevista en el PGOU, «y que facilitaría el desarrollo profesional de las más de 500 firmas allí presentes». Esta es la conclusión a la que han llegado los responsables de Apetam tras la reunión mantenida con Apoma y con la comunidad de propietarios del polígono Villa Rosa. La idea es trasladar estas peticiones próximamente al concejal de Urbanismo, Francisco Pomares, y el resto de responsables municipales en la materia. Los primeros acercamientos, según puntualizó Apoma, han sido «positivos».