El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, aseguró ayer que «la figura del juez de Vigilancia Penitenciaria ha consolidado un modelo penitenciario que es ejemplar en el ámbito europeo» y destacó el compromiso de estos magistrados a pesar de «las dificultades», animando a la judicatura en general a continuar la formación, «fundamental para dar un buen servicio a los ciudadanos».

Lesmes inauguró ayer el encuentro de Jueces de Vigilancia Penitenciaria, que reúne en Málaga a casi una treintena de magistrados de esta jurisdicción de toda España y en el que se abordarán cuestiones como los problemas derivados de la aplicación de la ley que regula el Estatuto de la Víctima del delito, las nuevas perspectivas en materia de libertad condicional o la suspensión de ejecución de la pena tras la reforma del Código Penal. Antes de inaugurar el encuentro, se reunió con estos magistrados para «poner en común problemas», trasladando éstos «necesidades importantes de reforma legislativa, también para la propia realización de su actividad profesional porque se encuentran en una situación de deficiente asistencia en la legislación», según explicó en su intervención en la inauguración. No obstante, Lesmes destacó que «lo más relevante» de esa reunión previa fue «el compromiso, la ilusión y el afán de superación puesto de manifiesto por todos a pesar de las dificultades». Así, incidió en que buena parte del desempeño de la labor de los jueces «depende de la formación», subrayando que desde el Consejo se es «consciente de la importancia» de esto «porque queremos la excelencia». «Como servidores públicos tenemos que trabajar para responder a las necesidades y a los problemas de los ciudadanos, ser menos introspectivos de estar pensando constantemente en nosotros, sino en ver cómo podemos mejor servir a los demás», manifestó , apuntando que «no podemos fallar a la sociedad y somos en la mayor parte de los casos la última opción que tienen los ciudadanos para resolver sus problemas». En este sentido, apuntó que «formación, excelencia y servicio a los ciudadanos están íntimamente relacionados»; una formación, dijo, que no debe «sólo acomodarse» a los cambios legislativos «sino también tenemos que anticiparnos».