«Todos los malagueños tienen que tener las mismas oportunidades, independientemente de donde viven». Con intención de cumplir con este objetivo, el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, dio a conocer este miércoles una nueva inversión de la institución provincial. En este caso, se destinarán unos 3,1 millones de euros a ayudas sociales. Una aportación enfocada a equilibrar las posibles desigualdades que se generan en la provincia. Acompañado por la tercera vicepresidenta de la institución, Ana Mata, y la edil de Servicios Sociales, Lourdes Burgos, detalló las diferentes líneas de ayuda que concederá la institución.

«Tratamos de corregir los desequilibrios sociales, ayudando a los que atraviesan más dificultades con actuaciones para que los vecinos de los pueblos pequeños tengan las mismas oportunidades que los de los grandes municipios. Colaboramos estrechamente con las entidades sociales que están trabajando de forma encomiable», detalló Bendodo. En el reparto de medallas, presidente de la Diputación quiso destacar que la inversión en cuestión ha resultado como fruto de la aportación que habrían realizado sobre este asunto todas las fuerzas políticas con representación en la Diputación.

En el caso de las ayudas destinadas a las personas, el importe global durante este año asciende a 1,6 millones de euros, que se repartirán a través de diferentes convocatorias públicas que ya están en marcha. Una de ellas, el cheque bebé que destina 300.000 euros a las familias en los pequeños municipios que tendrán descendencia en los próximos meses.

Otros 300.000 euros se destinan a la atención de las necesidades básicas de las víctimas de violencia de género y de sus hijos. También se concederán 300.000 euros para la adecuación de viviendas de personas con movilidad reducida y mayores, como cambios de bañera por platos de ducha, colocación de pasamanos en pasillos, adecuación del ancho de puerta o adaptación de cocina y mobiliario. «Esta medida presenta una absoluta novedad con respecto a anteriores ayudas», precisó Bendodo. Llevada a la práctica, permitirá adecuar las viviendas a las necesidades de las personas que han podido ir cambiando con el paso de los años y el avance de su edad.

Luchas contra la exclusión social

También habrá 267.503 euros para familias en riesgo de exclusión social, con ayudas dirigidas a necesidades básicas de menores de familias desestructuradas. Y otros 250.000 euros serán para ayudas para el apoyo a la convivencia e inserción social, que incluyen, entre otros apartados, las necesidades básicas, como alimentación, higiene o vestido, el alquiler de vivienda, la atención y cuidados para la salud y la habitabilidad de la vivienda. Por último, 200.000 euros se dedican a lucha contra la pobreza energética, para atender el pago de servicios básicos como luz, agua y gas. En este último caso, las ayudas se concederán de forma directa previa solicitud, al igual que sucede con las de urgencia y emergencia social, que suman 50.000 euros.

Bendodo resaltó, de nuevo, el trabajo que realizan las entidades sociales de la provincia, a las que se concederán subvenciones que suman 1,5 millones de euros para que desarrollen los proyectos sociales que llevan a cabo. «El tercer sector se ha convertido en una herramienta fundamental para el progreso», sentenció.