Los estudiantes de la Universidad de Málaga que se queden con la miel en los labios y a las puertas de conseguir una beca de régimen general del Ministerio de Educación, porque no cumplan los severos requisitos académicos que se exigen desde hace cinco años, tendrán al menos el consuelo de saber que la UMA no les quiere abandonar. Haciendo un importante esfuerzo presupuestario, el próximo curso las partidas de fondos propios destinada a conceder ayudas de estudio aumentará un 66 por ciento.

La UMA siempre pide al Ministerio que se rebajen estos requisitos (un 5.5 para tener beca de matrícula y 6.5 para la beca económica), porque entiende que en muchas ocasiones, y en determinadas carreras, es complicado llegar a ese nivel exigido. También solicita que los umbrales de renta suban, dado que puede entenderse que están muy bajos y hay una clase media de familias que no cumplen los requisitos, pero les supone un verdadero esfuerzo pagar una matrícula, máxime cuando los precios de la segundas y terceras son muy elevados.

Habida cuenta de que el Ministerio mantiene los criterios, la institución académica malagueña ha venido desarrollando de unos años a esta parte una serie de iniciativas con el objetivo de que ningún alumno se vea en la obligación de abandonar sus estudios por motivos económicos. El aumento de la dotación presupuestaria responde a este compromiso de la UMA, según informó el vicerrector de Estudiantes, José Francisco Murillo.

El curso pasado ya se aumentó el presupuesto de lo que hasta este curso se conocían como becas UMA-Junta (la Universidad aportaba 750.000 euros y el Gobierno andaluz 250.000 euros). A partir del curso que viene, la UMA aumenta en 500.000 euros su participación, mientras la Junta la mantiene. Con estas nuevas becas de cohesión social UMA-Junta, cada alumno solicitante, en función de sus circunstancias personales, podrá recibir hasta 1.200 euros por curso. «La convocatoria de estas becas saldrá a final de curso y han sido aprobadas en la comisión de becas nombrada por el claustro de la UMA», explicó el vicerrector.

La Universidad también ha incrementado las becas de emergencia que concede a los alumnos que han sufrido situaciones sobrevenidas durante el curso (separaciones de los padres, situaciones de desempleo o mundanzas). «Antes solo pagaban la mitad de la primera matrícula y ahora también vamos a pagar primera, segunda, tercera y sucesivas matrículas, hasta los 1.100 euros», explicó José Francisco Murillo.