Nueva vuelta de tuerca al futuro Metro de Málaga del PP de Málaga. El partido mantiene su negativa, pese al acuerdo firmado por el alcalde Francisco de la Torre en 2013, de llevar el suburbano al Civil por la avenida Eugenio Gross y Blas de Lezo. La última propuesta es llevar el trazado al cauce del río Guadalmedina, para que discurra hacia el norte de la ciudad. Esta mañana, el presidente de la Diputación malagueña y del PP de Málaga, Elías Bendodo, ha presentado esta alternativa para prolongar la línea 2.

La idea no es nueva. Es uno de los proyectos lanzados en la campaña de las elecciones nacionales de 2000, cuando Celia Villalobos, por entonces alcaldesa de Málaga, lanzó el Plan Guadalmedina, un ambicioso proyecto de embovedamiento del río, cuyo coste rondaba los 500 millones de euros. Tras la redacción de los proyectos para desviar el cauce del río en su parte norte por parte de Acusur, el proyecto quedó aparcado en 2004 debido a los informes contrarios. Este cauce está vivo, ya que está comunicado con varios arroyos y ejerce como aliviadero de la presa del Limonero. Sería un problema de seguridad. De hecho, el entonces director de la Cuenca Mediterránea Andaluza, Antonio Rodríguez Leal, dejaba claro que el plan era técnicamente inviable. Pese a estos reveses, en la pasada campaña electoral de 2014, Celia Villalobos recordaba en un chat con los lectores de La Opinión Celia Villalobos que fue uno de sus proyectos que le hubiese gustado terminar en su etapa como alcaldesa y remarcaba que "sigue siendo viable".

Sin una solución hidráulica para desviar el caudal del río, tal y como insistía en 2011 el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), dependiente del Ministerio de Fomento, los planes para llevar el metro por el cauce del Guadalmedina parecen desvenecerse. No lo ve así Elías Bendodo. El presidente de la Diputación planteaó ayer como alternativa para la prolongación de la línea 2 del metro de Málaga hacia el norte de la ciudad que el trazado discurra por el cauce del río Guadalmedina. Bendodo, que considera que en Málaga era "una necesidad más urgente" acometer el proyecto de integración urbana del río que el metro, explicó a Efe que la solución para llevar este transporte en superficie hacia la zona de Ciudad Jardín y los hospitales puede enmarcarse en el proyecto del Guadalmedina. "Si la Junta quiere hacer viable este proyecto y tiene que ser en superficie, que lo traslade unos metros" y opte por la solución urbana del río, que permitiría «no molestar a nadie" y que "tendremos que acometer entre todos".

A su juicio, la solución urbana al río Guadalmedina es "el gran reto" de Málaga capital, puesto que una ciudad que aspira a ser el tercer eje económico, social y turístico del país, tras Madrid y Barcelona, no puede tener el río en el estado en el que está actualmente