Agentes de la Policía Nacional han detenido a un total de 45 personas en la provincia de Málaga por su presunta implicación en otros tantos casos de simulación de delito en los meses de enero, febrero y marzo de este año.

Fingir un tirón del bolso o el robo de un teléfono móvil, cuando en realidad lo que se había producido era un hurto al descuido o un extravío, es el tipo de denuncia falsa más frecuente. El fin último de los investigados sería, según las pesquisas, ser resarcido por las compañías de seguros.

Los teléfonos móviles, los bolsos y carteras son los efectos que más extravían las personas implicadas y, en consecuencia, los que más generan este tipo de denuncias, según han detallado desde la Comisaría Provincial en un comunicado.

En enero, los agentes detuvieron por simulación de delito a once personas: seis en Málaga, dos en Marbella y tres en Torremolinos. El número de arrestados por este mismo tipo delictivo fue de 16 en febrero: nueve en la capital, seis en Torremolinos y uno en Vélez-Málaga; y de 18 en marzo, con diez en Málaga, cuatro en Marbella, dos en Torremolinos y uno en Estepona y Antequera.

El 'modus operandi' al que habitualmente recurren las personas que habrían simulado ser víctimas de delito es fingir haber sufrido un robo con violencia o intimidación, cuando lo que realmente ha sucedido a los supuestos perjudicados es que extraviaron sus efectos o se los hurtaron al descuido.

La Policía Nacional ha insistido en que denunciar hechos inexistentes tiene graves consecuencias. De hecho, han recalcado que "fingir ser víctima de un robo al objeto de cobrar una indemnización constituye un delito".