Los estudiantes son conscientes de que a partir de este lunes se juegan buena parte futuro a una carta. Y eso les parece injusto. Los exámenes de Selectividad, que este año se llaman EBAU (Evaluación de Bachillerato para Acceso a la Universidad) comienzan esta semana de forma simultánea en todas las provincias andaluzas. 7.260 alumnos se han matriculado para hacer las pruebas, aunque 1.252 solo harán los de la fase de admisión, con el objetivo de subir nota. A las 8.30 están citados los estudiantes, con toda la documentación en regla, en algunas de las 17 sedes que la UMA ha establecido para llevar a cabo los exámenes.

Este año la cifra de alumnos se mantiene con respecto al año anterior. Aunque es una realidad que en los últimos cursos el número de matriculados no ha dejado de crecer.

Los primeros exámenes serán los correspondientes a la ahora denominada fase de acceso, que incluye las asignaturas troncales y obligatorias: Análisis de Texto de Lengua Castellana, Comentario de Texto Histórico y Análisis de Texto de Lengua Extranjera. A esta fase también corresponde una asignatura optativa de su opción de Bachillerato.

La EBAU incluye algunos cambios respecto a la PAU. Por ejemplo, las pruebas de Historia de España y de Historia de Filosofía son las que más modificaciones presentan en la nueva Selectividad. En la primera se incluyen preguntas abiertas y semiabiertas y el alumno ya no solo podrá elegir un tema del siglo XIX o el siglo XX. Filosofía desaparece como obligatoria. La prueba se divide además en dos preguntas a elegir y en las que puede tocar, precisamente, Platón o Descartes, en un caso, o Santo Tomás de Aquino o Kant.

En los días siguientes, martes 13 de junio y miércoles, 14 de junio, se llevarán a cabo los exámenes de la fase de admisión. Entran en juego el resto de las asignaturas de Bachillerato, pero los alumnos también pueden elegir de qué se quieren examinar, como mínimo de dos materias, puesto que después sólo se consideran las dos mejores calificaciones y no se hace media con el resto.

La calificación global de Selectividad será la media aritmética de las calificaciones obtenidas, debiendo conseguir un mínimo de cuatro puntos para ser declarado apto. La calificación final y definitiva se calcula ponderando un 40% de la calificación global de la pruebas de Selectividad y un 60% de la media del Bachillerato. Para acceder a la Universidad, el alumno debe alcanzar al menos cinco puntos en esta calificación final.

Los alumnos este fin de semana terminan de prepararse la Selectividad. Nervios, mucho café para robarle horas al sueño, moreno de flexo ante la imposibilidad de ir a la playa o a la piscina... Aunque terminaron el curso a final de mayo, han seguido yendo al instituto, para participar en clases de apoyo, donde han podido resolver sus últimas dudas. Saben que el león no es tan fiero como lo pintan. Sin embargo, y aunque la Selectividad esté concebida para ayudar a los alumnos a sumar décimas, como un mal día puede tenerlo cualquiera, temen que un tropiezo pueda dejarles sin opciones de acceder a la carrera deseada. Sobre todo si se trata de los grados más demandados.

En este caso, en la UMA Medicina sigue siendo la titulación a la que acceden los alumnos más brillantes. El año pasado la nota de corte se quedó en un exigente 12,66. La carreras de la rama sanitaria (Fisioterapia, Podología o Terapia Ocupacional) le siguen a la zaga. También los dobles grados de GADE y Economía o GADE y Derecho, Bioquímica o Traducción en Inglés.