El consejo del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) aprobó ayer suscribir un convenio con la Universidad de Málaga (UMA) para efectuar un inventario del patrimonio histórico de la ciudad, dado que sus acciones de protección, conservación y puesta en valor están divididas en diferentes documentos y atañen a distintas administraciones. En principio, la primera partida económica inyectada es de 18.000 euros y la iniciativa forma parte de los acuerdos entre el PP y Ciudadanos para los presupuestos de este año.

En el convenio, al que tuvo acceso La Opinión de Málaga, se constata que Málaga «cuenta con un amplio y vasto patrimonio, cuyas acciones de protección, conservación y puesta en valor se encuentran divididas en diferentes documentos, considerando el IMV muy adecuada para su mejor explotación y puesta al servicio del ciudadano la realización de un trabajo que englobe de forma integral los aspectos arquitectónicos, patrimoniales, tecnológicos, de gestión y valoración y, en general, de concepción científica del mismo». La Escuela de Arquitectura de la UMA es el ámbito docente adecuado para realizar este trabajo.

El punto tres de este convenio tiene un hondo calado, dado que se pacta «el asesoramiento técnico y científico en materia de valoración económica de la protección del Patrimonio Histórico de Málaga. Para ello, se elaborará un diagnóstico que defina las prioridades de la intervención con una valoración aproximada de las mismas y las posibles acciones a llevar a cabo con objetivos reales». Es decir, de ese documento saldrá qué hacer con cada elemento que forma parte del patrimonio y cuánto costaría hacerlo.

Otras acciones

Pero hay más acciones: organizar y ejecutar actividades comunes relacionadas con la promoción de la investigación, la innovación y el desarrollo tecnológico del Patrimonio Histórico andaluz; la cooperación del IMV en la formación de los estudiantes de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura: para ello, se fomentará la participación de asignaturas del grado de arquitecto que se centrarán en el estudio del patrimonio local, así como también se financiarán las becas-colaboración entre los alumnos y se llevarán a cabo seminarios y jornadas formativas paralelas; por último, se elaborará un proyecto de investigación de transferencia tecnológica en sintonía con una de las estrategias RIS3 de la comunidad andaluza, centrado en la protección del patrimonio como forma de cultura.

También se organizarán cursos, seminarios, conferencias, se fomentará la participación en procesos de catalogación y clasificación documentales, así como otras actividades que sean consideradas de interés mutuo de la UMA y el IMV. El segundo abonará a la primera 72.600 euros en tres partes, a abonar en tres cuatrimestres.