La Gerencia de Urbanismo encargará una auditoría referida a los miles de expedientes de infracción que habrían quedado sin tramitar en los últimos diez años y sobre los plazos de concesión de licencias de obras, que han sufrido un severo retraso en los últimos tres años.

El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Málaga ha aceptado la realización de dicha auditoría, así como la convocatoria extraordinaria del consejo rector de la Gerencia de Urbanismo, esto último a propuesta del PSOE, para debatir en profundidad sobre estos dos asuntos, que los grupos de la oposición calificaron ayer de «escandalosos» en la comisión de Ordenación del Territorio.

La aceptación obligada de la auditoría y del consejo rector le sirvió al concejal de Ordenación del Territorio, Francisco Pomares, para eludir dar explicaciones sobre el retraso en las licencias y los miles de expedientes no tramitados. Apenas hizo una alusión a que se ha mejorado el número de concesiones de licencias y las inversiones. Ni una palabra acerca de los miles de expedientes de infracción prescritos, pese a que la oposición le ha reclamado explicaciones. Pomares se remitió a lo que se diga en el consejo rector y a la comisión de Transparencia que se celebrará hoy, donde el grupo Ciudadanos ha introducido el tema.«Caos y descontrol»

La oposición planteó ayer batalla con tres mociones presentadas por el PSOE, Málaga Ahora e IU Málaga para la Gente, apoyadas por Ciudadanos y el concejal no adscrito. Finalmente, el PP decidió sumarse por lo que las propuestas incluidas en esas tres mociones fueron aprobadas por unanimidad.

Esto no impidió a la oposición criticar con dureza la situación «de caos y descontrol» que se vive en Urbanismo. «Algo falla en Urbanismo, señor Pomares», le fue martilleando hasta seis veces el concejal socialista Daniel Pérez, ratificado por Alejandro Carballo, de Ciudadanos, quien recordó que «lo que está ocurriendo en Urbanismo hace años que no ocurría».

Pomares trató levemente de sacar pecho recordando los datos ofrecidos el pasado viernes sobre aumento del número de licencias concedidas y de la inversión que estas licencias generan. Le contestó Alejandro Carballo, señalando que el hecho de que haya más licencias concedidas no tiene que ver con que sufran más retrasos en su concesión. «Es como en la sanidad, hay más pacientes atendidos, pero eso no impide que aumenten también las listas de espera».

Los acuerdos adoptados determinan que la Gerencia de Urbanismo deberá hacer una auditoría para conocer las denuncias y expedientes de infracción, fijando su número, origen y causa, señalando los que hayan caducado y los que estén próximos a hacerlo; igualmente, Urbanismo deberá implantar «mecanismos de calidad» en el departamento de Licencias para impedir que se repitan situaciones como las de ahora.

En última instancia, Urbanismo acepta «depurar responsabilidades», si la auditoría demuestra la existencia de «ineficacia en la gestión», que debería centrarse en la jefatura del departamento de licencias «que ha provocado más problemas que soluciones».