Los malagueños respiran un aire que es bueno o normal en el 95 por ciento de la ciudad y solo un centenar de puntos que suponen el 5 por ciento restante arroja niveles de baja calidad del aire. Pese a ser una capital con un importante tráfico en sus vías de comunicación los niveles de dióxido de carbono (CO2) son medios y muy por debajo de otras capitales como Madrid, Sevilla, Bilbao o Barcelona. Son los primeros resultados de un estudio iniciado por el Ayuntamiento el pasado mes de marzo a partir de 40 medidores instalados en otras tantas bicicletas que han recorrido la ciudad y dirigidos por la empresa especializada Urban Clouds.

Los dispositivos instalados en la bicicletas han medio los gases contaminantes como dióxido de nitrógeno, ozono, cloro, monoxido de carbono así como polvo en suspensión, temperatura ambiente y humedad relativa.

De los 130 puntos con niveles rojos de calidad del aire, la mayoría se corresponde con puntos de alta concentración de tráfico como la antigua N-340 a su paso por el aeropuerto o determinados puntos de las rondas de circunvalación.

Los trabajos de análisis se alargarán hasta finales de año. Ahora se establecerán 15 puntos de verificación que se analizarán con las rutas que realizan los carteros de la ciudad. Además en los 130 puntos donde el nivel de aires es de mala calidad se realizará un segundo análisis de verificación para poder establecer y discriminar los gases que contribuyen a esos bajos niveles y buscar soluciones.

De manera específica el concejal de Medio Ambiente que ha presentado hoy los resultados de este primer diagnóstico, Raúl Jiménez ha señalado como el medidor colocado de manera permanente en La Araña, junto a la fábrica de cemento, arroja niveles “muy normales” del estado del aire.

Aquí puede consultar los resultados de toda la ciudad.