La primera jornada del I Congreso de Cibercrimen Internacional organizado por el Colegio de Abogados de Málaga se centró ayer en el papel de los agentes encubiertos, las evidencias digitales y el abuso sexual infantil a través de internet. En el acto de inauguración participaron el decano de la corporación colegial, Francisco Javier Lara; el subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones; la presidenta de la Audiencia Provincial, Lourdes García Ortiz, y Julián Millán, oficial de Inteligencia Criminal en la Secretaría General de la Interpol.

El decano apuntó que la gran mayoría de los ciudadanos, en la medida en que son usuarios de internet, están expuestos a delitos informáticos que se deben conocer para prevenirlos y, en caso de llegar a ser víctimas, saber cómo actuar.

Ciberacoso, secuestros informáticos, explotación sexual, acceso e interceptación ilícitas de equipos y de información; delitos contra el honor, contra la propiedad intelectual o industrial, falsificación informática, las amenazas o coacciones y el fraude informático son algunos de los peligros que acechan a ciudadanos, empresas, instituciones e incluso estados.

Según Millán, «internet tiene ventajas e inconvenientes, de modo que no importa la herramienta en sí sino el uso que se le da», y alertó de que está creciendo de manera alarmante la producción de material sexual con menores por demanda, en streaming.