Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado jueves en Málaga a un joven de 19 años y nacionalidad holandesa en virtud de una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) dictada por las autoridades judiciales holandesas por delitos contra las personas. Los policías lo arrestaron en las inmediaciones del aeropuerto Málaga-Costa del Sol, lugar al que había llegado para recoger a unos familiares procedentes de los Países Bajos. El hombre, ataviado con gorra y gafas oscuras, fue localizado por los agentes que tras identificarle comprobaron que sobre él pesaba una OEDE solicitada por las autoridades judiciales de su país.
Según consta en la orden europea de extradición, esta persona, el 1 de enero de este año, disparó con un arma de fuego desde un vehículo hacia la ventana de una vivienda, que estaba cubierta, por lo que no era posible ver el interior. El fugitivo disparó ocho veces contra la ventana y, a consecuencia de los disparos resultó herido un menor de 13 años.
Un mes más tarde, el 4 de febrero, el reclamado, según los hechos que motivan la OEDE y de los que informó la Policía Nacional en un comunicado, golpeó intencionadamente en la cabeza a un hombre que cuatro días después falleció en el centro médico al que había sido trasladado a consecuencia de las lesiones sufridas. La víctima fue golpeada después de que intentara mediar en una pelea entre dos personas en un bar.
El fiscal jefe de la Fiscalía de Rotterdam emitió una orden con una recompensa de 15.000 euros. El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, en Madrid.
