Málaga recordó en la tarde del sábado al concejal popular José María Martín Carpena, asesinado a las diez menos veinte de la noche del 15 de julio de 2000, hace 17 años, a manos de un pistolero de ETA, que por entonces había enviado un comando a Andalucía para causar estragos en la temporada alta turística y casi se lleva también por delante la vida del ex secretario provincial del PSOE, José Asenjo. Los disparos, mortales de necesidad, se hicieron en presencia de la mujer del edil, Elvira Calvente, y de su hija de 17 años en aquellas fechas. Carpena se dirigía al pregón de la Biznaga. Nada más conocerse la noticia, en la ciudad se formó un gran revuelo y pocos días después la urbe entera se echó a la calle para pedir el cese de la violencia, el silencio de las pistolas.

Cada año, desde esa fatídica fecha, las instituciones rinden homenaje a un hombre recordado por su humanidad y su modestia. Así, ayer se dieron cita en el parque de Huelin las principales figuras políticas provinciales y autonómicas para hacer varias ofrendas florales al busto que recuerda a Martín Carpena, un acto en el que también estuvieron presentes Calvente y la hija del concejal. Entre las autoridades, destacan el alcalde, Francisco de la Torre, y varios concejales del equipo de gobierno y de la oposición, tales como el portavoz de Ciudadanos, Juan Cassá, o el portavoz del PSOE, Daniel Pérez. También hicieron acto de presencia el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, el presidente del PP Andaluz, Juanma Moreno Bonilla, su antecesor en el cargo, Javier Arenas, y los diputados nacionales del PP Avelino Barrionuevo y Carolina España, entre muchos otros.

El acto fue sencillo y emotivo. Las distintas instituciones y partidos hicieron sus respectivas ofrendas florales, se guardó un minuto de silencio y se rezó un padre nuestro. Tras la oración, hubo aplausos para recordar al fallecido. Poco antes de que diera comienzo el acto en una calurosa tarde, Moreno Bonilla dijo: «Estamos rindiendo un homenaje a un ciudadano, un andaluz y un malagueño que perdió su vida a manos del terrorismo; además, este hecho cobra esta semana una mayor dimensión porque se ha celebrado también el veinte aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, y eso supone pues para todos recordar y rememorar la dignidad y la memoria de cientos de españoles que dieron lo mejor de ellos defendiendo la pluralidad y la libertad, conceptos que conforman la convivencia dentro de la nación española».

El presidente del PP andaluz también destacó que José María Martín Carpena «era amigo, yo tuve la suerte de coincidir con él, es un día que nos trae recuerdos muy amargos, fue muy duro aquel asesinato delante de su mujer, de su hija, supuso una gran convulsión en la sociedad malagueña». Así, insistió en que el PP no va a olvidar, «por muchos años que pasen, a las víctimas del terrorismo. Siempre vamos a pedir justicia, quedan casos por resolver, y por eso vamos a pedir el cumplimiento de las penas y que haya justicia para todo aquel que de una manera activa o pasiva colaboró con el terrorismo de ETA en los últimos 50 años». «José María era humilde, asequible, una persona trabajadora, un gran padre de familia, los malagueños que le conocimos le echamos de menos todos los días».

El alcalde, por su parte, dijo recordar como si fuera ayer el día del asesinato, «la tarde que tenía lugar la fiesta de la Biznaga». «Fue un mazazo para todos sus amigos, su familia, la corporación municipal. Recuerdo la reacción de Málaga, masiva, popular, de rechazo, de condena, de apoyo a la familia y al Estado democrático», afirmó el regidor malagueño.