Nadie entiende en Málaga la cerrazón del ministro Juan Ignacio Zoido de contruir en la ciudad un nuevo Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE) cuando el pleno del Ayuntamiento aprobó por unanimidad hace poco más de dos años, el 26 de febrero de 2015, el rechazo a la implantación de este tipo de instalaciones. Málaga dice no al nuevo CIE que plantea el Gobierno. Dijo que no entonces. Volvió a decir no el pasado 4 de abril, cuando el Ministerio volvió a hablar de esta posibilidad. E insiste en su negativa ahora que Zoido ya cuenta con un borrador del proyecto de construcción de tres nuevos CIE en Málaga, Algeciras y Madrid, así como la remodelación de los existentes.
Según Zoido, «lamentablemente estos centros no pueden desaparecer» porque su existencia responde a un imperativo del derecho de la UE y del ordenamiento jurídico español que lo desarrolla. Para Málaga Acoge, sin embargo, «es una barbaridad seguir privando del derecho a la libertad a personas que no han cometido ningún delito, sino una infracción administrativa», según Arancha Triguero, la presidenta de esta ONG, quien apuesta por optar por alternativas más respetuosas con los derechos fundamentales.
«Por supuesto rechazamos frontalmente este proyecto y confiamos en que tanto el Ayuntamiento de Málaga como la Diputación Provincial se muestren firmes en su decisión adoptada en su día y mantengan que Málaga es una ciudad libre de CIE», añadió Triguero en declaraciones a este diario.
El alcalde, Francisco de la Torre, por otro lado, ayer dijo que desconoce los planes del Gobierno pero incidió en que dialogarán con el Ministerio y a nivel interno «porque el mensaje de solidaridad a la hora de la verdad también hay que aplicarlo».
Desde su punto de vista, el reto de estos CIE será que su contenido «sea el adecuado» aunque insistió en que no dispone de datos sobre el proyecto previsto en Málaga. El pleno del Ayuntamiento de la capital rechazó la implantación en la ciudad de unas instalaciones de este tipo y entonces el alcalde ya dijo que su postura no iba a ser «a favor».
De la Torre también dijo ayer que aunque los gobiernos «tienen que cumplir las determinaciones y normas de Bruselas en la materia», el «gran reto de Europa» es la cooperación al desarrollo y ser «eficaces» en ello. «Hay una gran sensibilidad para atender a refugiados pero también preocupación por la inmigración. Hoy se habla de un gran plan de apoyo y algo hay que hacer aunque se debería haber hecho hace más de 20 años», recalcó el regidor malagueño, quien dijo que los gobiernos en esta materia han de ser «más colaboradores y más eficaces».
También puso el énfasis en que «hay que demostrar sensibilidad y humanidad» con personas que pasan muchas dificultades «y que llegan a la búsqueda de un futuro mejor», considerando que los CIE «hay que entenderlos en una dinámica abierta y solidaria».
Por su parte, el portavoz del grupo municipal Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla, también recordó el rechazo de su formación a que la capital albergue un Centro de Internamiento de Extranjeros. Y recordó al alcalde el compromiso que «adquirió ante el papa Francisco y otros foros de defender a los refugiados».
Junto a la edil Remedios Ramos descartó la creación de otro CIE en Málaga y recordó la moción institucional aprobada por declarando a la ciudad «libre de CIE y eso compromete al alcalde y le obliga a hacer cumplir los acuerdos». Zorrilla considera que De la torre «puede tener una actitud cínica» al mostrarse en contra de los CIE «sabiendo que el Gobierno lo hará de todas formas». «Lo que dice el alcalde pinta muy poco y en el PP no le hacen caso», apostilló ayer.
Málaga tenía un CIE en el barrio de Capuchinos que estuvo abierto 14 años y cerró sus puertas hace cinco, después de muchas denuncias y del mal estado de las instalaciones.
