No habrá negociación política para desbloquear el futuro de los suelos de Repsol y encontrar una salida a la actual situación de parálisis que sufre este suelo de 170.000 metros cuadrados, con tres propuestas distintas que van de la construcción de cuatro rascacielos y un parque, que defiende el PP; pasando por la de una sola torre y el resto parque urbano y comercial, que plantea Ciudadanos; y una tercera que defienden los grupos de la oposición de izquierdas y colectivos ciudadanos que aboga porque todo el suelo se convierta en un gran bosque urbano, sin asomo de viviendas u otros usos.
El bloqueo de la situación es manifiesto desde que legalmente se constató las dificultades de poner en marcha una consulta ciudadana, que había acordado el pleno, para decidir sobre las distintas alternativas.
Advertencia cara al presupuesto
Así las cosas, el grupo Ciudadanos ha intentado una operación de desbloqueo llevando al pleno una propuesta que pedía al resto de los grupos «iniciar un proceso negociador» para alcanzar una mayoría de manera que los suelos de Repsol acojan una gran zona verde y una rebaja «sustancial» de la edificabilidad prevista en el PGOU.
Pero se ha encontrado con un frontón en cada grupo que, enrocado cada uno en su propuesta, no han querido saber nada de nada; ni siquiera sentarse a negociar. El resultado ha sido rotundo: todos en contra (27 votos) frente a Ciudadanos (3 votos a favor).
«Queremos aprovechar este ecuador del mandato para volver a hacer un intento por desbloquear un proyecto estratégico para dos distritos que lo necesitan», afirmó el portavoz de Ciudadanos, Juan Cassá, que dejó claro que «ofrecemos negociar sin imponer nada. La mayor zona verde, al menor coste posible».
Uno tras otro, los portavoces del resto de los grupos fueron poniendo por delante su propuesta que consideran «innegociable»
Ante tal panorama, Ciudadanos, que ha ganado para su causa en este asunto a la federación de asociaciones Cívilis, cuyo presidente Antonio Fuentes, intervino en el pleno en defensa de esa negociación, lanzó una advertencia, dirigida especialmente al equipo de gobierno. Cassá explicó que van a utilizar su poder político y su situación clave como socio del equipo de gobierno para forzar la situación de tal manera que Ciudadanos condicionará su apoyo al presupuesto municipal del año próximo a un compromiso expreso del PP de sentarse a negociar para desbloquear el futuro de esos suelos de Repsol.
