Lo dijo y lo hizo, este es un país en el que algunos se toman la justicia por su mano. Juana Rivas se ha escapado con sus dos hijos y no los entrega a su ex, italiano, como ordenó un juez de Granada. Pero ¿no hay que cumplir la ley?, ¿o solo la que nos gusta? Eso sí, el pacto de Estado contra la violencia de género se abre paso en el Congreso por unanimidad y sin amparar a los hombres, ¿y la venda de la diosa Justicia?, ¡ah!, hace tiempo se le cayó de los ojos porque era políticamente incorrecto no distinguir entre los justiciables. Y también está la violencia de los hijos contra los padres, uno de ellos agredido por el bueno de su vástago a la puerta de la comisaría de Málaga tras arrepentirse el progenitor de denunciarlo por maltrato. Entiendo que una ley que proteja a todos sin distinción de géneros sería más justa e integradora y una gran oportunidad para la convivencia. Pero… Más me gusta la absolución de la madre de un niño de 11 años denunciada por darle un bofetón a éste; el magistrado constata que el menor tenía una actitud violenta y despectiva hacia su madre. Si no corriges a tu hijo, se te revolverá violentamente, o a cualquiera que se le ponga por delante. Pasa todos los días y lo vemos.

La historia hace zig zags, no es lineal. Ahora, la Audiencia de Madrid no ve delito en el mensaje de Hazte Oír y anula la inmovilización cautelar del bus naranja y tacha lo sucedido de una «persecución de ideas». Eso pensamos los que defendemos el artículo 20 de la Constitución, y el 155 también. Lo entiende perfectamente uno de nuestros intelectuales más lúcidos, Ignacio Gómez de Liaño, que se pasea estos días por Málaga y declara que le parece inconcebible que un país en el que no serían admisibles leyes que discriminasen a chinos o negros admita partidos que discriminan a los españoles, como sucede en Cataluña. Pues claro.

Y Muere Manuel Maeso, fundador de La Carta Malacitana; me adelantaba el fatal pronóstico hace un par de meses Armando Herranz, el capitán de Frutos, por eso se le rindió un homenaje en vida. Manolo fue un gran defensor de la dieta mediterránea. Descanse en paz.

Bueno, la cena en La Bohéme el sábado 22 estuvo muy bien con 23 Collective, un grupo de jazz de Madrid, aunque parecía rock. El nuevo local de Damián Caneda, con Adolfo Jaime de supervisor, sale de puerto. ¡Feliz singladura!

Pero otros, como una recién creada plataforma, no cesan en su denuncia contra lo que consideran las malas prácticas del CAC Málaga y el MAD Antequera. Artistas, docentes y gestores han presentado su manifiesto antifrancés y ahí está, por ejemplo, Rogelio López Cuenca. Sostienen que el CAC es el único museo de España administrado íntegramente por una empresa privada a través de fondos públicos y que esto perjudica a los ciudadanos. Pues yo creo que es lo ideal, que sean las empresas privadas -que no vamos a descubrir ahora que administran mejor que las públicas- las que gestionen estas y otras entidades. Eso sí, el próximo concurso para la adjudicación del CAC coincido en que debe estar formado por un jurado de expertos independientes, pero no necesariamente locales, ¿por qué hay que ser tan de aquí cuando el mundo va más allá?

Un ejemplo es Colau, que no se corta un pelo y defiende contratar a amigos y familiares; alega que los cargos de confianza «se extinguirían» si se prohibiera que la parentela y los compiyoguis ocupasen cargos públicos. ¡Qué cara más dura! En cambio, Raúl Jiménez, concejal de Málaga, tiene el raro gesto de reconocer en este periódico que «en el Ayuntamiento no hemos sido suficientemente eficientes para que la ciudad esté limpia», declaración que le honra -aunque algo tendrá de culpa en el desaguisado- habida cuenta de lo infrecuente de la autocrítica en la clase política. Pero, hay que fastidiarse, la nueva cárcel de Archidona sigue sin fecha de apertura, pese a que la necesitamos más que nunca. Cuántas cosas se nos ocurren cuando pensamos en quienes podrían poblar el recinto penitenciario. Señor, líbranos de los malos pensamientos. Don Miguel de Unamuno escribió desde sus adentros:

Este buitre voraz de ceño torvoque me devora las entrañas fieroy es mi único constante compañerolabra mis penas con su pico corvo.