Ni la rebaja de un 3% al reducirse un punto su tipo impositivo, ni las importantes bonificaciones y exenciones fiscales que llegan en algunos casos al 95% aprobadas por el Ayuntamiento han frenado la imparable subida del impuesto de Plusvalía de 2016 en Málaga. El incremento ha sido espectacular, cifrado en algo mas de un 41% sobre las previsiones iniciales. El presupuesto tenía una previsión inicial de 43,4 millones de euros y finalmente la recaudación ha superado los 61,4 millones Todo un desahogo para la tesorería de la ciudad.

¿A que se debe este ascenso?. Los expertos consultados señalan que es a varios factores que analizaremos, pero principalmente a que la recuperación económica del mercado inmobiliario está propiciando grandes transacciones comerciales. No son las pequeñas operaciones de transmisiones por herencia tras el fallecimiento del propietario del inmueble ­-con valores impositivos de 4.000 ó 6.000 euros- las que propician este empuje en la recaudación, son las grandes operaciones económicas, producto de una recuperación de la actividad mercantil las que llenan la bolsa de este impuesto. Se trata de operaciones, como la realizada con el cambio de propiedad de un hotel en la zona de El Bulto, que generan plusvalías que van de los 500.000 al millón de euros.

Otro factor, directamente relacionado con el anterior, es que tras varios años de actividad judicial, los procedimientos concursales por la quiebra de empresas inmobiliarias han pasado ya a manos de los acreedores, como los bancos y estos los están poniendo a la venta y generando la plusvalía exigible. También aquí se trata de operaciones de gran calado económico con gran impacto impositivo.

Hipótesis

Por contra, las medidas de exenciones y bonificaciones fiscales aprobadas para 2016 apenas han tenido repercusión, de manera que sus efectos en la recaudación todavía no se han hecho efectivos. Ello se debe a que en los casos de transmisiones por herencia mortis causi los afectados tienen seis meses, prorrogable por otros seis, para realizar los procedimientos necesarios de cara a conseguir la bonificación y hacer la liquidación.

El Ayuntamiento aplica el máximo legal permitido, el 95%, para todos los inmuebles residenciales de menos de 75.000 euros de valor catastral, que son el 71% de la ciudad. La bonificación baja a un 70% para viviendas de hasta 120.000 euros de valor catastral y a un 15% para las que tienen un valor superior a los 125.000 euros.

En última instancia las previsiones de cara a la recaudación por Plusvalía se mueven en el terreno de la hipótesis pues, a diferencia de otros impuestos, como el IBI el IAE o el de Circulación, que tienen un padrón que sirve de referente para establecer previsiones mas ajustadas, la Plusvalía carece de ello y trabaja con suposiciones y datos anteriores que dejan un amplio escenario para los cambios y hacen que las previsiones tengan un amplio margen de maniobra.