«Lo que pido básicamente a la nueva corporación es que cuide la Cueva del Tesoro», recalca Manuel Laza, hijo de Manuel Laza Palacio, el redescubridor de esta gruta de origen marino del Rincón, declarada Bien de Interés del Cultural.

Desde 1991, los Laza alquilan la cueva al Ayuntamiento de Rincón de la Victoria por 2.200 euros al mes pero el paso de los sucesivos partidos ha llevado a este profesor de Lengua y Literatura jubilado a una conclusión: «En el tema de la cueva no hay discrepancias entre el PP y el PSOE, su objetivo es lisa y llanamente la titularidad de la cueva». A su juicio, el mantenimiento y funcionamiento de esta joya de la Prehistoria siempre han estado en un segundo plano y han interesado bien poco a los diferentes equipos de gobierno.

Al hacer balance de los dos últimos años, en los que el Consistorio ha estado gobernado por los socialistas, Manuel Laza cree que la cueva «está en peores circunstancias que cuando la tomó el PSOE» y pone el ejemplo de la medida de retirar las guías. «Ahora te dan una audioguía en varios idiomas y por lo que he podido escuchar, se trata de una información muy deficiente».

La falta de guías propicia que los visitantes entren solos, sin vigilancia, «a su aire», critica el propietario, en una gruta de incalculable valor, con pinturas prehistóricas pero también con barandillas rotas y oxidadas y en algunos tramos, con cuerdas como único agarre.

«Esto no puede ser», admite el popular Antonio José Martín, que el pasado miércoles visitaba la cueva con Manuel Laza, en compañía de La Opinión. Martín es el nuevo concejal de Cultura desde la llegada en junio del PP al Ayuntamiento tras una moción de censura, y responsable además de la Cueva del Tesoro. «Yo soy de Rincón de la Victoria, he crecido con la cueva y me duele su estado», admite.

Para las penosas barandillas, cuenta, ya hay una solución, encarrilada por la anterior corporación, precisa con deportividad. «Ya tenemos presupuesto, hemos estado en la Cueva de Nerja con técnicos nuestros porque allí han cambiado todo el sistema de barandillas. Quiero afinar con el presupuesto más bajo para aprovechar y cambiar la entrada, las taquillas y darle un aspecto más moderno».

Antonio José Martín calcula que «a final de año» ya estarán listos los cambios.

Con respecto a la falta de guías, también reconoció que no es el modelo adecuado y abogó porque cada vez que bajen visitantes con sus audioguías, haya personal de la cueva acompañándoles.

Manuel Laza aprovechó para hablar de la expropiación forzosa de la cueva, iniciada por el Ayuntamiento de Rincón en 2009, entonces en manos socialistas. Para el propietario de la cueva se trata de un gasto muy elevado para las arcas públicas (una comisión de expertos la tasó en 4,9 millones) completamente «evitable».

«Como ya he propuesto varias veces, se puede hacer un alquiler por la misma cantidad por 50 o 100 años», apunta, pero la propuesta que cree más idónea, a semejanza de la Cueva de Nerja, sería poner en marcha una fundación sin ánimo de lucro, en la que entre otros estarían representadas la familia y el Consistorios. «Lo ofrecí cuando se inició la expropiación forzosa y lo vuelvo a ofrecer, le saldría gratis al Ayuntamiento». Manuel Laza recalca que su familia no está interesada en el dinero sino en que la Cueva esté en buenas manos.

De paso, abogó porque se cumpla la ley y este BIC cuente de una vez con un arqueólogo titulado que dirija los estudios y la dé a conocer en el ámbito internacional, lo que también le haría merecedora de subvenciones.

El hijo del redescubridor también mostró su preocupación por el reciente anuncio del rodaje de un cortometraje de terror en la cueva, que no ha sido comunicado a la familia propietaria por el anterior equipo socialista.

Antonio José Martín aprovechó para aclarar que «oficialmente no hay nada de nada, si se dirigen a nosotros aquí no se va a tocar nada sin infomar antes a la familia y luego sin autorización de la Junta». Por último, el concejal señaló que la nueva corporación estudiará la propuesta de Laza de una fundación sin ánimo de lucro.

Una nueva etapa para la cueva, necesitada de mejoras urgentes.