El viceportavoz del Grupo Municipal Socialista, Sergio Brenes, denunció ayer que tres viviendas de la calle Camino Nuevo, en Churriana, tienen grietas tanto en la parte exterior como en el interior, algo que los vecinos achacan a las obras que Emasa hizo hace tres años para meter un colector de pluviales junto a las casas. Ahora, Brenes, como consejero de la empresa pública, ha remitido una carta al alcalde, fechada el 16 de agosto, para que dé parte a la aseguradora de la sociedad pública y verifique los daños.

El concejal socialista Salvador Trujillo se reunió en agosto con los vecinos y visitó sus viviendas para comprobar los desperfectos, de forma que pudo constatar que «había grietas tanto en la fachada como en el interior de las casas».

Esa tubería se colocó para recoger las aguas de lluvia de la parte alta de la barriada en la zona de Camino del Retiro, la Tosca y el Cuartón para «evitar las continuas inundaciones que sufría la parte baja de Churriana, donde se ubican las viviendas de los Portales o la Junta de Distrito», explica Brenes, quien añade que «aunque no ha resuelto el problema de las inundaciones, esa obra parece que ha generado daños a varias viviendas desde el mismo momento en el que se estaban ejecutando». Brenes, consejero de Emasa, ha dirigido una carta al alcalde, Francisco de la Torre, para que dé parte a la aseguradora de la empresa y verifique los daños. «No es la primera vez que unas obras de Emasa o una avería en la red de aguas provocan daños a las estructuras de las viviendas y han de asumir los costes de reparación, como fue el caso de los daños en dos casas de la Antonio Barata en Huertecilla Mañas en 2014», dijo.

El PSOE en el Ayuntamiento pidió que se periten los daños por si se han producido movimientos en el suelo que hayan afectado a la cimentación, provocando alteraciones en las estructuras. «Hay que despejar cualquier duda al respecto, pero parece evidente que si hay tres viviendas afectadas y la fachada lateral de una importante empresa de catering, algo ha debido ocurrir en la mecánica del terreno», señaló. También en la propia zanja de la tubería de aguas pluviales se observan grietas y hundimientos en el asfalto. «Lo primero debe ser garantizar la seguridad y, por tanto, iniciar los estudios para despejar cualquier duda», aclaró, para añadir que la situación deseable es «que esas grietas sólo sean daños en enfoscados y no revistan peligro alguno». En su carta a De la Torre, Brenes señala: «Dado el deterioro y la gravedad en la que esa situación pueda derivar si no se actúa, le solicito que disponga las medidas necesarias para averiguar» lo sucedido.