El buque anfibio 'Juan Carlos I' visitará Málaga el próximo 28 de octubre, en la que será la cuarta presencia en la ciudad del mayor buque de la Armada española tras la realizada en febrero de 2016, que actúa en ocasiones como portaaeronaves y se encuentra entre los más avanzados de su clase. La visita de este barco permitirá ofrecer visitas guiadas al buque durante su estancia en la ciudad, atracando en el dique de Levante del Puerto de Málaga, donde hay atraques con suficiente capacidad y que tendrá que compartir con varios cruceros previstos para ese día.

La presencia de este buque anfibio permitirá además la organización de una jura de bandera para civiles, para lo que hay que rellenar una solicitud antes del 25 de octubre en la Subdelegación de Defensa, situada en el Paseo de la Farola. El acto de la jura será el 28 de octubre a las 12.00 horas en la cubierta del 'Juan Carlos I'.

El 'Juan Carlos I' es el mayor buque de la flota española, con una eslora de 231 metros y una manga (ancho) de 32 metros. Junto a esas dimensiones, este buque destaca por dos aspectos. Uno es que responde al más moderno concepto de la defensa naval, apostando por la flexibilidad de uso que le permite adaptar su configuración a cuatro perfiles de operaciones. Así, puede actuar como buque de operaciones anfibias con dos diques inundables para lanchas de desembarco; para el transporte de material en operaciones conjuntas con otros países; como portaaviones con una capacidad de entre 25 y 30 aeronaves (aviones y helicópteros) y para misiones humanitarias, disponiendo de un hospital embarcado de 500 metros cuadrados, dos quirófanos y Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) con ocho plazas.

La capacidad total de este buque es de 1.435 personas, aunque la tripulación ronda las 295 personas. El 'Juan Carlos I' destaca además por la avanzada tecnología que lleva embarcada, tanto en el sistema de propulsión como en los radares, con tres de diseño y fabricación española a través de la empresa Indra.

Además, desarrolla una velocidad máxima de 21 nudos y una autonomía de 9.000 millas a 15 nudos gracias a un sistema de propulsión que combina motores eléctricos y diésel.