Cuatro personas acusadas de expoliar un nido de águilas reales y llevarse dos crías se han conformado con los hechos por los que eran acusados por la Fiscalía malagueña y han aceptado la pena de cuatro meses de prisión y dos años de inhabilitación para cazar y pescar.

Para la conformidad se ha celebrado una vista en un Juzgado de lo Penal de Málaga donde ha comparecido los acusados y el fiscal, según han informado a Efe fuentes judiciales.

El águila real se encuentra protegida por la Ley de Flora y Fauna Silvestres de Andalucía y está incluida en el régimen de protección especial en el decreto para el desarrollo del listado de especies silvestres y del catálogo español.

Los acusados fueron detenidos el 10 de mayo de 2014, sobre las 19.30 horas, en el monte Alcaparaín, en Málaga, después de expoliar el mencionado nido y los agentes encontraron dentro de una mochila dos crías, cuando ya estaban dentro del vehículo.

En el relato acusatorio se explica que ese día tres de los acusados fueron hasta donde estaba el nido y uno de ellos, que es escalador, accedió para tomar las dos crías protegidas, mientras la cuarta persona esperaba en el vehículo haciendo "labores de vigilancia".

Uno de los acusados es cetrero y regenta un centro de reproducción de aves rapaces en Sevilla, según el ministerio público.

Las crías, una vez intervenidas, fueron nuevamente devueltas a su nido por funcionarios del Servicio de Protección de la Naturaleza