El edil de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga, Francisco Pomares, ha criticado esta mañana en una rueda de prensa que, después de siete años de abandono, la Junta de Andalucía aún no le haya dado una salida al edificio de Correos, que recibió el Gobierno autonómico en 2010 en el marco de la deuda histórica que mantenía el Ejecutivo central con la región. El concejal ha insistido en que "en todas las reuniones que hemos tenido ya hemos dicho que vamos a dar todas las facilidades para el cambio de uso a hotelero dentro de la legalidad vigente".

Ha criticado Pomares que ni se haya subastado el edificio en siete años ni se haya instado ya el cambio de uso. El edificio, ha explicado, estaba valorado en 35 millones de euros en 2008, pero presentaba muchos problemas estructurales que no se reflejaron en ese precio. "Es una trampa", ha dicho Pomares, quien ha insistido en que se le podía haber dado un uso público, sobre todo teniendo como tiene la Junta numerosas sedes alquiladas, "con un edificio vacío".

Luego, ha relatado, la Junta dijo que iba a esperar ofrecimientos, "sabemos que hay muchas empresas interesadas en comprarlo", pero la rehabilitación cuesta un millón de euros y estas ofertas se han hecho en 2016 y 2017 por la mitad del valor por el que se traspasó a la Junta. "Después se ha hablado de cambiarlo a uso hotelero. ¿Por qué la Junta no lo saca ya a licitación? Por una cuestión política, porque no quiere que se desarrolle Málaga; o por un valor especulativo, se quiere recuperar el valor del hotel", ha señalado. Luego, ha recalcado que la modificación de cambio de uso puede instarla la Junta "hoy mismo" o el comprador una vez subastado.

Para iniciar el trámite, el Consistorio necesita la evaluación ambiental estratégica, que debe hacer la propia administración andaluza. "Ni han hablado entre ellos. Es falta de interés, desidia. Si hubiera interés en recuperar el dinero ya lo habrían subastado como hotel", ha aclarado.

El portavoz del equipo de gobierno, Carlos Conde, por su parte, ha criticado el pésimo estado de conservación del edificio, con una fachada "repleta de grafitis y suciedad y con zonas verdes sin mantenimiento". "Es impropio que una ciudad como Málaga tenga en pleno Centro un edificio en estas condiciones y nos preguntamos si la Junta consentiría que ocurriese lo mismo en otra ciudad o si esto forma parte del castigo y el bloqueo al que la señora Susana Díaz tiene sometida nuestra ciudad". Mientras esté cerrado, Conde ha pedido por lo menos que se dé una imagen exterior digna.

Además, Conde ha recordado que los vecinos y comerciantes de la zona se quejan de los problemas generados por las obras del tramo Renfe-Guadalmedina del Metro, que llevan tres años paradas. "Además de las molestias de tráfico ocasionadas, han convertido el perímetro de obras en un estercolero, porque las zonas de obra señaladas no sólo han servido para el acopio de materiales sino también para almacenar basura", ha declarado, para insistir en que el Ayuntamiento ha pedido varias veces a la Junta que garantice la limpieza de la zona, ya que esto es competencia de la adjudicataria de los trabajos y su vigilancia corresponde a la licitadora, que es la Junta. Ha pedido que se desvincule la ejecución de este tramo con la extensión de la línea al Hospital Civil y que haya transparencia, además de criticar el estado del pavimento y la señalética en un tramo por el que pasan cada día más de 31.000 coches.

"Tanto el inmueble de Correos como el metro tienen como denominador común la mala gestión de la Junta que lleva siete años con el edificio cerrado a cal y canto y tres años con las obras del suburbano paradas, de modo que no son sólo proyectos que no avanzan, sino que están ocasionando problemas en el entorno y no ofrecen una imagen digna del Centro de la sexta ciudad de España", ha dicho.