Málaga es una de las provincias donde más pruebas de conducir se han suspendido con motivo de la huelga de examinadores de Tráfico, según los datos de una respuesta parlamentaria del Gobierno al diputado socialista Miguel Ángel Heredia. En concreto, en Málaga se han suspendido desde el mes de junio y hasta el 18 de septiembre un total de 4.654 exámenes, una cifra que se sitúa sólo por detrás de Barcelona (10.841), Madrid (7.797) y Sevilla (4.822). La huelga, que sigue activa, obligó a suprimir en sus cuatro primeros meses casi 104.000 exámenes en todo el país, una cifra que actualmente alcanza ya los 160.000.
Tras Málaga se sitúa Valencia (4.630) y, ya por debajo de las 4.000 pruebas suspendidas, figuran Alicante (3.661), Almería (3.159), Vizcaya (3.005) y Jaén (2.974). Las provincias que menos afectadas se han visto por los parones son Baleares, en donde no se contabilizaron cancelaciones; en Ceuta, en donde se suspendieron siete pruebas; y en Melilla, con 32.
Ante esta situación, Heredia denunció ayer que desde que el PP llegó al Gobierno se ha recortado en un 15% el número de examinadores en España. Según una respuesta parlamentaria, en 2011 había 873 examinadores y 2017 el número ha bajado hasta los 745.
«La huelga persiste y lo último que se conoce no es muy halagüeño, hace pocas fechas el director general de Tráfico, Gregorio Serrano, afirmaba que veía convincentes las razones de Hacienda para no subir los salarios a los examinadores», dijo el diputado socialista, que no ve en el Ejecutivo intenciones de terminar con esta situación. Heredia dijo que no sólo se han suspendido numerosos exámenes, sino que hay «cientos de autoescuelas bloqueadas» por los paros. También advirtió del «sobrecoste» que esta huelga supone para los alumnos que, al no poder hacer la prueba han tenido que dar en muchos casos más clases de lo previsto.
El diputado acusó al Gobierno de «mantener el conflicto» de los examinadores «porque quiere privatizar el sector» y «eliminar las pequeñas y medianas autoescuelas para que las grandes se queden con todo el negocio». «Si este problema se alarga hasta el próximo año pueden acabar cerrando más de la mitad de las casi 300 autoescuelas de la provincia y afectando a los 2.000 trabajadores del sector», alertó. «Sólo se necesitan unos 2,5 millones de euros para cumplir con el compromiso que el Gobierno adquirió en 2015 de un complemento económico por la carga de trabajo. La reivindicación de un complemento específico para los examinadores está más que justificada por una carga de trabajo muy elevada y por los riesgos de amenazas y agresiones que padece este colectivo», dijo.
El colectivo de examinadores Asextra, por su parte, ha convocado una manifestación el próximo 14 de noviembre ante la Jefatura Provincial de Tráfico en Málaga.
