Una parte del comercio tradicional de Málaga resiste a los tiempos de la globalización y además, desde este viernes se reivindica en una calle donde abundan las franquicias: la calle Larios.

Por iniciativa del Área para la Reactivación Económica del Ayuntamiento de Málaga, el alcalde Francisco de la Torre inauguró este viernes la muestra Reconocimiento al comercio tradicional malagueño, con paneles fotográficos de 37 establecimientos de la ciudad cargados de historia, con una trayectoria que va desde los 28 hasta los 177 años.

La muestra podrá visitarse hasta el próximo 1 de diciembre, y la intención es que, a su vez, malagueños y turistas tengan muy presentes estos establecimientos.

El más veterano de todos es la Antigua Casa de Guardia de la Alameda Principal, fundada en 1840, el año en el que la reina María Cristina cedió la regencia de España al general Espartero, por la minoría de edad de Isabel II. Las letras rojas y negras de los rótulos de la Casa de Guardia fueron tomadas como modelo por el Ayuntamiento, hace unos años, para rotular todas las calles del Centro Histórico.

Le sigue la Sombrerería de Pedro Mira, abierta en 1880, un año antes del nacimiento de Pablo Ruiz Picasso y poco después, en 1885 -al año siguiente del terremoto que asoló Málaga y Granada- la Ferretería El Llavín.

Además, del siglo XIX en nuestra ciudad continúan Casa Mira (1890), la Armería Aguirre (1890), la Farmacia Mata (1894) y con el cambio de dígitos, en 1900 llegó la Carnicería Medina y una década más tarde, en 1910, la Sastrería Guzmán. Cierra la lista de los diez establecimientos con más de un siglo de vida, Calzados Chaparro (1915) y Toldos Labrador (1917).

Y aunque en calle Larios las franquicias sean mayoría, algunos de sus comercios tradicionales también forman parte de la exposición, como la joyería de Aurelio Marcos, que abrió sus puertas en 1950 o la Farmacia Mata, de 1890.

Gran parte de los comerciantes que protagonizan las fotos aprovecharon para posar junto a sus paneles, como los veteranos Baltasar y Antonio Navarro, los conocidos Navarro Hermanos, que abrieron su negocio de recambios de motos y bicicletas en 1963 en la calle Carretería.

El alcalde, que se hizo una foto de grupo con los comerciantes, declaró que la exposición es «un pequeño homenaje a los que fueron más pioneros y a los que fueron antecedentes de la gran vida comercial que Málaga tiene hoy y que queremos que siga teniendo en el futuro».

El Ayuntamiento tiene previsto identificar el comercio tradicional con una placa en la fachada del local, para contribuir al esfuerzo de los comerciantes y dinamizar el negocio local.